En el Norte Argentino hay un paisaje espectacular y escondido que se destaca por contrastar en gran forma con el lugar en el que está emplazado: se trata de un río turquesa de gran belleza que está rodeado de una paisaje árido en el que la vegetación es casi inexistente.
Estamos hablando del pequeño río Aguada del Cobre, que está ubicado al pie de las estimaciones de la Sierra de la Aconquija, envuelto en un paisaje imponente e inolvidable que se genera por el color turquesa que emite en el medio del desierto.
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No es común ver un río de estas características en la zona y el fenómeno se produce por la presencia de cobre que existe en el lugar que cuando se combina con el agua que emana entre las piedras de la montaña provoca que el mineral se sulfate y adquiera un color turquesa intenso.
Este río escocido está ubicado en la localidad catamarqueña de Andalgalá, una ciudad en la que se pueden visitar museos y que está muy cerca de las Minas de las Capillitas, un sitio donde se extrae una piedra semipreciosa llamada Rodocrosita.