Boca está golpeado: el agónico empate de Fortaleza en la Bombonera, que complicó las chances de finalizar en el primer puesto en la zona de la Copa Sudamericana, obligó al cuerpo técnico a pasar de página.
El entrenador Diego Martínez ya puso la cabeza en la visita de este domingo a Central Córdoba, por la segunda fecha de la Liga Profesional, pero surgieron algunos inconvenientes para el armado del once titular.
La línea defensiva le trajo dolores de cabeza al técnico, que deberá reconstruir la zona ante las numerosas bajas. La última confirmada fue la de Nicolás Figal, que tiene un problema muscular que lo dejará afuera al menos por dos semanas.
A las bajas de Marcos Rojo -desgarro en el isquiotibial izquierdo- y Aaron Anselmino -se resintió de su lesión- se sumó una alarma inesperada: este viernes Cristian Lema sintió un pinchazo en el gemelo derecho durante la práctica matutina.
El marcador central se hará estudios para conocer la gravedad de la lesión, pero por lo pronto abrió otra duda más para el armado de la defensa en la cabeza de Diego Martínez con vistas al partido del domingo en Santiago del Estero.