Carlos Ingino, reconocido productor porcino, explicó por LT10 que desde diciembre a esta parte bajó un 30% el precio de la carne de cerdo y no se incrementó el consumo. Aunque reconoce que “en este último mes notamos una leve mejora con respecto a los primeros cuatro meses del año en ventas”.
El productor explica que sigue siendo la carne más barata y detalla que “una pulpa de cerdo es mucho más barata que una pulpa de pollo, que siempre fue al revés. Nosotros éramos la segunda carne en valor y hoy somos la tercera”.
Esto impacta negativamente en el sector ya que si bien el precio del producto bajó muchísimo luego de un aumento considerable antes de diciembre, pero los costos de producción aumentaron al menos un 60% a lo cual se le suman gastos como la luz que se incrementó en un 360% y los salarios que fueron acompañando a la inflación.
Este contexto es muy desfavorable para los pequeños productores ya que los productores mas grandes están trabajando prácticamente al costo, mientras que los pequeños están trabajando a perdida.