Durante 90 minutos hoy por la noche, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, tiene la oportunidad de mostrar a sus compatriotas que dudan que, a sus 81 años, es capaz de manejar los rigores de otro mandato de cuatro años, cuando se enfrente a en un debate contra el republicano Donald Trump.
Una buena actuación podría ayudar a neutralizar esas preocupaciones y centrar la atención de los votantes en cuestiones políticas.
Un desempeño débil podría frenar la recaudación de fondos y empujar a Trump aún más adelante en las encuestas, según un análisis de la agencia de noticias Reuters que remarcó: ambos hombres están bajo escrutinio por su edad y resistencia.
Trump tiene 78 años y es propenso a pronunciar declaraciones extravagantes y a deformar sus frases durante la campaña electoral.
Biden tiene un andar rígido, comete errores verbales y tiene apariciones públicas inconsistentes, pasando a veces de discursos pronunciados con solidez a comentarios públicos apresurados y murmurados en el mismo día.
Una encuesta reciente de Reuters-Ipsos mostró que la aptitud mental es una de las cuestiones clave para los votantes indecisos antes de las elecciones del 5 de noviembre, y están más preocupados por Biden.