Según los expertos, las visitas al médico por problemas auditivos aumentan durante la época invernal. Y es que las variaciones de temperatura propician las apariciones de faringitis, catarros y gripe que en muchas ocasiones acaban trayendo de la mano rinitis e incluso otitis. En este sentido, la prevención vuelve a ser clave.
“La principal causa de la inflamación del oído puede atribuirse a una inmunidad comprometida en el frío que provoca irritación y retiene humedad y bacterias que causan otitis media. La infección se produce debido al dolor de garganta o incluso a una infección respiratoria, ya que la trompa de Eustaquio se bloquea y se siente dolor”, afirma el Dr. Alkesh Oswal (ENT) del Hospital Apollo Spectra de Pune, India.
Los síntomas de una infección de oído pueden ser dolores, mareos, sensibilidad, hinchazón, secreción inusual y pérdida temporal de la audición.
“El dolor de oído será intenso si uno está en un espacio abierto donde hay exposición al aire frío”, afirma el Dr. Oswal.
El taponamiento del oído por frío
Con el frío, ocurre una contracción en la zona del oído externo que tiene que ver con la corriente sanguínea. En consecuencia, al flujo sanguíneo va a costarle más circular a través de esta delicada estructura, lo que traerá como consecuencia ciertas molestias. Entre ellas, que se sientan taponados los oídos a causa del frío.
Esa sensación de chasquido es el intento del cuerpo de adaptarse a un cambio repentino en la presión del aire.
La Dra. Deepti Sinha, consultora principal del Departamento de Otorrinolaringología del Hospital CK Birla (R) de Delhi, explicó: “La presión del aire puede ser menor debido a las bajas temperaturas, en particular en áreas pequeñas como el oído medio. Esta diferencia de presión afecta las trompas de Eustaquio, que equilibran la presión en cada lado del tímpano. Sentimos un chasquido en los oídos cuando estas trompas no pueden controlar la presión”.
Cómo destapar los oídos
Si se tienen los oídos tapados, hay que intentar tragar, bostezar o masticar chicle sin azúcar para abrir las trompas de Eustaquio. Si esto no funciona, se aconseja respirar profundamente y tratar de soplar por la nariz suavemente mientras se tapa la nariz con los dedos y se mantiene la boca cerrada.
Teniendo conocimiento de lo anterior, los especialistas remarcan que es importante cubrir los oídos al salir al exterior, no importa si solo se va a algún lugar o si se practicará alguna actividad. Medidas sencillas, como usar gorro u orejeras, serán muy buenas. Por otra parte, es importante que los oídos estén limpios ¡pero no a profundidad! Cierta cantidad de cera lubricante es buena en el interior, pero en la parte externa se puede retirar con un paño húmedo, sin utilizar hisopos.