El piloto argentino arrancó bien la jornada en la práctica inicial, ubicándose entre los diez primeros al girar en 1m49s786, una marca que luego mejoraría a 1m48s602 para ser 12º en el orden, un lugar por delante de Alex Albon, su compañero en Williams.
Tras la bandera roja motivada por un choque de Charles Leclerc en la curva 15, Colapinto alcanzó un registro de 1m47s901 que volvía a dejarlo por delante de su compañero, que giraba en 1m47s955.
Sin embargo, momentos después llegó un accidente del piloto argentino contra el muro de la curva 4 tras perder el control de su monoplaza, lo que le causó varios daños al coche.
Los mecánicos pudieron repararlo para volver a la pista transcurridos los primeros minutos de la segunda práctica, y allí Colapinto aprovechó la oportunidad para volver a ganar confianza en el circuito de Bakú y cerrar el viernes de buena manera.
El piloto de 21 años alcanzó un mejor tiempo de 1m44s7449 con neumáticos blandos para terminar el día en la 14º posición, a solamente 12 milésimas de lo conseguido por Albon, y luego mostró un ritmo sólido en el simulacro de carrera con neumáticos medios.
"Es un día positivo. Obviamente, creo que los héroes del día son los mecánicos, que hicieron un trabajo increíble para tener el auto otra vez en la FP2. No almorzaron, estuvieron a fondo todo el día. Estoy súper agradecido con ellos, que fueron los que hicieron posible que tenga más experiencia en el circuito, que pueda completar la sesión en la FP2", comenzó Colapinto a analizar la jornada en diálogo con ESPN.
Sobre el incidente de la primera práctica, el argentino indicó que fue peor el momento que tuvo en la clasificación de Italia, pero que las consecuencias son otras en una pista callejera.
"Fue un pequeño error, fue chiquito. Creo que hasta el de Monza en la clasificación fue más grande, pero acá no perdona. Es una lástima porque se había roto el auto, pero ya pasó", comentó.
Colapinto valoró el trabajo realizado en la segunda práctica libre, en la que pudo volver a demostrar velocidad, pero no sin tomar riesgos entre los muros de Bakú.
"Creo que tuvimos una FP2 muy positiva. Venía mejorando bastante en mi segunda vuelta hasta que toqué un poco la pared en el Castillo otra vez. Le estuve dando un par de besos a los muros hoy, pero estoy acostumbrándome. Es un circuito complicado, así que sigo agarrando ritmo y confianza de a poco".
"Esa confianza que necesitás en un circuito callejero viene de a poco, y cuando tocás la pared se va rápido. Así que hay que ir a poco de vuelta y agarra mecha. Lo ideal era que si tenía que pasar, que sea en la primera práctica. Obviamente lo ideal era que no pasara, pero pasó y ya quedó atrás", insistió.
El piloto de Williams apuntó a que debe trabajar en el desgaste de los neumáticos, un aspecto que se espera que sea clave el domingo en la carrera por las altas temperaturas y las características del circuito.
"El equipo hizo un buen trabajo. El auto está andando bien, estoy contento. Tenemos que entender un poco la degradación de las gomas, se sobrecalientan mucho las traseras, hay muchas curvas de tracción, muchas curvas lentas donde salís acelerando y es muy fácil patinar. Es trabajo para hoy a la noche y mañana a arrancar más fuertes", finalizó el argentino.