La de este fin de semana en Brasil fue sin duda la peor presentación de Franco Colapinto desde su debut. Tras 5 muy buenas actuaciones iniciales, la sexta fue la vencida. En un GP que estuvo muy accidentado desde la primeras prácticas por las adversas condiciones climáticas, tuvo un primer choque en la clasificación que lo dejó afuera en Q1, y luego debió abandonar por la misma razón la carrera en la vuelta 32.
Fue un domingo definitivamente fatídico para Williams, ya que su corredor de cabecera, Alex Albon, ni siquiera pudo comenzar la final en Interlagos por su propio accidente en Q3. Pero el no poder terminar el circuito no sería la única mala noticia del día para el argentino, cuya continuidad en la Fórmula 1 en 2025 comienza a comprometerse.
Pero esto no tiene que ver con lo que le sucedió con su monoplaza, sino con que Sauber, uno de los equipos que tenían una plaza libre para el año que viene, habría ocupado el asiento vacante con Gabriel Bortoleto. Campeón de la Fórmula 3 en 2023 y líder de la Fórmula 2 en este 2024 con Invicta Racing, la escudería suiza ya estaría en negociaciones avanzadas con él.
De este modo, el piloto brasileño se convertiría en la nueva cara de la máxima categoría del deporte automotor y sería el compañero de Nico Hülkenberg, actualmente en Haas. Así, Sauber cambiará toda su plantilla (este año contaba con el chino Guanyu Zhou y el finlandés Valtteri Bottas) de cara a lo que será también el cambio de marca en 2026, cuando pasarán a ser Audi.
Colapinto se queda entonces con una opción menos para disputar la Fórmula 1 en 2025. Sin lugar en Williams, que ya de antemano había arreglado la llegada de Carlos Sainz, el argentino únicamente podrá decir presente si finalmente logra arreglar con Red Bull, ya sea en la primera línea al lado de Max Verstappen, o en el segundo equipo de la escudería, Racing Bulls.