Nacional y Peñarol se enfrentaron en una edición de la Supercopa Uruguaya en el estadio Centenario, donde el Bolso logró gritar campeón al imponer por 2-1 gracias a los goles de Nicolás "Diente" López y Jeremia Recoba; un enfrentamiento donde descontó Diego García y terminó en escándalo por una nueva bataola entre los planteles.
La gran clave del juego fue la gran forma en la que el Bolso logró terminar el primer tiempo, donde luego del penal con el que López abrió el marcador en el minuto 37 del primer tiempo, llegaría un golazo por parte de Jeremía Recoba, hijo de Álvaro "El Chino", quien decretó el 2-0 parcial con una brillante definición digna de su padre. Una ventaja que resultó clave debido a el Manya solamente logró acortar la diferencia a un gol de distancia en el complemento.
Los ánimos venían caldeados luego del cruce pocos días atrás en el mismo escenario en un amistoso de pretemporada y más aun luego de una breve interrupción al juego luego de que hinchas del Carbonero lanzaran bengalas al campo de juego. El punto de ebullición se dio luego de un choque por la espalda de Diego Herazo a Rodrigo Pérez, lo que provocó una escaramuza que escaló rápidamente como es costumbre entre estos dos equipos.
A raíz de este fuerte enfrentamiento se tomó la determinación de no solo expulsar a Herazo y Pérez sino también a López y a Javier Cabrera por parte del Carbonero, luego de una gresca generalizada que encontró una sanción salomónica por parte de Javier Burgos.
Esa pelea fue lo último del encuentro que coronó al Tricolor de La Blanqueada como "supercampeón" del fútbol uruguayo, al quedarse con un nuevo título en su historia, el cual volvió oficial cuando Diego Polenta y Sebastián Coates levantaron junto el trofeo para el delirio de los fanáticos del Bolso; la tercera conquista de este torneo creado en 2018 y la primera vez desde 2021 para cortar con el bicampeonato que llevaba Liverpool en el certamen.