Cuatrocientas cincuenta familias de diferentes barrios del Gran Santa Fe recibieron en diciembre del año pasado una caja con todo lo necesario para celebrar la Navidad. Bajo el moño, no sólo hallaron alimentos: también dibujos para los más chiquitos y regalos pensados para cada uno de ellos por otra familia santafesina.
Ésa es la propuesta que el grupo de jóvenes “Nochebuena para todos con Jesús, María y José” realiza desde 2010, y que este año busca reunir diez veces más cajas que la primera vez.
“La cantidad se duplica cada año, no sólo porque cada vez más parroquias y ONGs nos piden cajas para sus comunidades, sino también porque cada vez más familias deciden hacer posible la Navidad para otros”. Así lo contó Agostina Rubbera, una de las organizadoras de este año, quien también detalló los destinos.
Para cumplir con todos los pedidos, este año el grupo necesita reunir 600 cajas para destinar a familias de la comunidad mocoví Com Caia de Recreo, de la Capilla Santa Bernardita de barrio San Pantaleón, del Centro de Día del Hospital Psiquiátrico, a la Parroquia Jesús Resucitado de Alto Verde y la San Alonso Rodríguez del Paraje La Boca; y para quienes habitan los barrios de la zona costera de La Guardia y Colastiné.
Cada caja, un puente
Los destinatarios de las cajas son seleccionados por diferentes ONGs con sede barrial, quienes realizan un relevamiento minucioso de la composición familiar y sus necesidades.
Así, la Navidad oficia de nexo: cuando una familia pide colaborar con el armado de una caja con todo lo necesario para celebrar Nochebuena, este grupo de jóvenes le asigna otra familia con los nombres y apellidos de sus integrantes, sus edades y hasta gustos y necesidades, y talles de ropa y calzado.
“La idea es que la caja sirva de puente: que lleve adentro un mensaje de esperanza, una carta o un dibujito de los más chiquitos para los chicos de la otra familia, y hasta regalos pensados para cada uno”, contó Agostina.
La experiencia indica que la iniciativa que comienza con lo más necesario crece cada día al sumar elementos y el cubo de cartón que parecía imposible de llenar queda chico para transportar todo el contenido.
“Suele pasar que las cajas, que al principio parecen grandes, quedan chicas con tanto entusiasmo, con regalos y mensajes; por eso pedimos que elijan cajas grandes al inicio para no sumar más de un bulto para transportar”, explicó la organizadora.
Suman voluntarios
Tal como el año pasado, el grupo recibe solicitudes por mail y en su perfil de Facebook (ver al pie). La recepción de las cajas será el viernes 18 de diciembre de 17 a 20.30, y el sábado 19 de 9.30 a 13 en el Colegio Inmaculada (San Martín 1540).
Por la logística que requiere, Agostina destacó que no sólo reciben solicitudes de cajas: el grupo también acepta voluntarios. “Necesitamos ayuda para recibir las cajas, y quienes sumen sus manos y vehículos para distribuirlas y entregarlas en cada destino”, agregó. Su entusiasmo evidencia el pensamiento que la motiva: “Detrás de cada caja de Navidad, hay una familia esperando”.
En detalle
Contenido: Budín; 3 latas de paté; 1 kilo de arroz; 2 latas de atún; 2 latas de jardinera; 1 pote de kilo de dulce de leche; 1 leche larga vida; para beber: variedad de jugos de frutas en sobres. A estos elementos pueden sumarse otros como pan dulce; garrapiñadas; turrones; velas, manteles y servilletas navideñas y vajilla descartable con motivos navideños.
Crecimiento: en la primera edición, en 2010, se entregaron 50 cajas. En 2013 llegaron a 250 familias; y el año pasado 450. Para este año prevén superar las 600.
En todo el país: Nochebuena para Todos nació hace 16 años en Buenos Aires, como iniciativa de un grupo de amigas. Hoy, la misma iniciativa se realiza en diferentes puntos del país e incluso en el exterior: en ciudades de Brasil y Bolivia. Cada punto es una réplica del proyecto original que forma una red que crece a lo largo de todo el país y que traspasa fronteras.