Detalles escabrosos se supieron hoy en el marco de la audiencia de ampliación de imputación y de prisión preventiva contra Marco Feruglio (25), el cuádruple homicida de Santa Fe y Sauce Viejo.
Uno de los más conmocionantes fue suministrado por la fiscal Cristina Ferraro, quien entre los elementos probatorios sobre la autoría del doble crimen de Sauce, nombró las fotos encontradas en el celular de Feruglio, en las que se ven los cadáveres de Claudia Oliva y Nicolás Estrubia.
Por otra parte, se constató que Gustavo Dusso recibió 18 puñaladas y su hija Camila, 15. Mientras todo ocurría, uno de los hijos que el imputado tiene en común con Romina Dusso, le pedía a gritos “que no le hiciera nada a su mamá”.
Asimismo, Brisa, una chica de 18 años que estaba de visita, quedó frente a frente con el asesino luego de que apuñalara a su amiga Camila. “Marco, yo a vos no te hice nada”, le dijo. “Tenés razón”, reconoció él, y le perdonó la vida.
Además, una vez perpetrados los crímenes, Feruglio subió al 9º piso y ante la pregunta de una vecina, le contestó que había dos personas fallecidas, pero “que se quede tranquila”, que él le abriría la puerta a la policía.
46 minutos pasaron entre el ingreso y la salida del homicida al edificio de 25 de Mayo al 1600.