Los sacrificios y hábitos saludables que se gestaron durante la semana pueden perderse en un día. No importa cuál. El problema es que durante los sábados y domingos, momento en el que la mayoría de las personas encuentra su descanso, también decide relajarse respecto a los alimentos que elige para incorporar durante las comidas.
Y relajarse no es sinónimo de comer de todo sin ningún tipo de control, como tampoco "fin de semana" debe estar visto como un micro período de restricciones que no se dan en los días anteriores. Es decir, es viable darse gustos y comer algo rico, sobre todo cuando varias de las típicas comidas de estos días invitan a disfrutar con familiares o amigos. Pero todo en su justa medida.
"Respecto de comer en exceso un día a la semana, dentro de un plan de alimentación normal, se le dar lugar a una comida de permitido o darse un gusto específico. El problema es que ese permitido no se sea comer en exceso y durante todas las comidas del fin de semana", explicó a Infobae la nutricionista Antonela De Lamo (MN 8.226).
¿Cuál es el secreto para no destruir una dieta en 24 horas? "Comer de todo, pero no todo. Porque no es la última cena y todas las personas quieren estar espléndidas. Es importante saciar ese costado de placer, pero siempre en su justa medida", dijo la médica especialista en nutrición Mónica Katz.
Es la pizza o son las empanadas. El asado del domingo o los fideos con la salsa tentadora. Las facturas y hamburguesas o el alcohol que puede consumirse de más. Todas las excusas posibles para no centrarse en lo importante: la decisión de controlar los placeres y pensar más allá del sabor de un alimento.
"El organismo necesita que no prohibamos alimentos pero sí que lo que vayamos a elegir ese día sea moderado. Y tomarlo como un gusto, que no sea se esos atracones que suelen presentarse desde el inicio del fin de semana hasta el final, en donde se come y se bebe en exceso. Mi consejo es elegir una comida o un postre que nos guste y comerlo con ganas. No sentir culpa", agregó De Lamo.
Para el doctor Máximo Ravenna no se debe contemplar el exceso bajo el ala del placer. "No es razón para que una dieta equilibrada pierda su rumbo ni tampoco un justificativo para una comida fuera del plan. Es importante comer cosas ricas y que a la persona le guste, pero también que sepa cuáles son sus límites y ahí decida parar", expresó el especialista.