Unión cerró una campaña histórica que terminó con la clasificación a la Copa Sudamericana, en lo que representará su primera participación en un certamen organizado por la Conmebol. Cuando arrancó el proceso el objetivo era conservar la categoría pero el gran rendimiento terminó con el premio mayor.
Ahora la cabeza deberá repartirse en tres frentes, ya que el Tatengue deberá disputar la Superliga 2017/2018, la Sudamericana del año que viene y la Copa Argentina, donde viene de sortear la primera fase tras derrotar a Juventud Unida de Gualeguaychú por 2-0 en el estadio Presbítero Bartolomé Grella.
El primero de los temas a resolver por los directivos pasa por la continuidad de Leonardo Madelón, quien cuando regresó al club para afrontar su tercer ciclo arregló un contrato por una temporada. Ahora se deberán juntar con el representante Cristian Bragarnik, quien maneja los destinos futbolísticos del DT, quien demandaría un vínculo entre tres y cuatro años.
En tanto, habrá que hacer un esfuerzo económico para comprarle parte del pase a Yeimar Gómez Andrade, por lo que habrá que hacer un desembolso de alrededor de 250 mil dólares, más acordar un nuevo vínculo.
Mientras que en la mitad de la cancha la gran preocupación pasa en torno a Nelson Acevedo, quien no podrá seguir en el club en calidad de préstamo y para que continúe deberán comprarle a Racing la mitad de la ficha, tasada en 800 mil dólares.
Por último, la otra gran apuesta económica está dada en retener a Lucas Gamba, por quien se hizo una oferta muy importante. Sin embargo, estaría muy lejos de lo que le ofrecen al mendocino del fútbol mexicano, más allá del interés que hay de Independiente, San Lorenzo, Huracán y Gimnasia y Esgrima de La Plata.
Además, los popes tatengues deberán resolver los nuevos contratos y préstamos por Nereo Fernández, Damián Martínez, Leonardo Sánchez, Luciano Balbi y Franco Fragapane, entre otros.