Unión se está armando para volver a ser protagonista en la Superliga que se viene. Lo hizo fortaleciendo la base, que solo se vio fisurada con la partida de Lucas Gamba a Huracán. Para ello llegaron seis refuerzos: Claudio Corvalán, Augusto Lotti, Braian Álvarez, Franco Troyansky, Gabriel Compagnucci y Matías García, con lo cual hay más variantes respecto al anterior grupo, al que Leonardo Madelón siempre ponderó, resaltando en todo momento que estaban "cortos".
Ahora el panorama luce diferente, máxime si se puede retener a Franco Soldano, que hoy parece ser el jugador a vender. Haciendo un repaso, el DT tendría dos jugadores por puesto. El arquero el titular es Nereo Fernández y compiten más atrás Joaquín Papaleo y Marcos Peano.
En el lateral derecho está Damián Martínez y el sustituto sería Brian Blasi; Yeimar Pastor Gómez Andrade y Jonathan Bottinelli son los dueños de la zaga, y más atrás esperan el mismo Blasi y Mariano Gómez; en tanto en el lateral izquierdo está Claudio Corvalán, aunque se recupera Bruno Pittón.
En el medio Diego Zabala está por la derecha y llegó Gabriel Compagnucci para hacerle sombra. En el medio copan Mauro Pittón y Nelson Acevedo, pero están Manuel De Iriondo y Matías García como relevos; y por la izquierda aparece Franco Fragapane como titular, aunque hay variantes detrás en Rodrigo Gómez y Braian Álvarez.
Finalmente en ataque está Soldano como máximo exponente y después pugnan por un puesto Troyansky, Augusto Lotti y Matías Gallegos. El 4-4-2 parece ser el esquema insignia, mutando de ser necesario en el 4-2-3-1. Actualmente el entrenador puede mirar al banco en busca de soluciones cuando vea que lo que está en el campo no funciona, algo que antes no podía hacer.
Será cuestión de que todos los nuevos entiendan la idea y se adapten rápido para que el potencial sea todavía mayor.