La relación entre Colón y Tomás Sandoval no deja de sorprender, ya que el hijo del Loco demuestra cada vez que le toca sumar minutos que tiene un olfato de gol inigualable, aunque todos los técnicos que pasaron en los últimos años por el club generalmente lo tuvieron relegado.
Una prueba cabal de esto es lo que ocurrió en la Copa Sudamericana, donde Pablo Lavallén se decidió por colocar un equipo alternativo y Tomi convirtió los dos de la victoria ante Deportivo Municipal. El primer fue con mucha autoridad desde los 12 pasos, mientras que el segundo fue una verdadera joyita, ya que sacó a relucir todo su repertorio y de taco sentenció dicho encuentro, en lo que fue el mejor gol de la semana para la Conmebol.
Sin embargo, a la semana siguiente Lavallén dio una larga lista de jugadores que viajarían a Buenos Aires para enfrentar primero a Tigre por la revancha de la primera fase de la Copa de la Superliga, y para jugar ante Acassuso en el debut del Sabalero en la Copa Argentina, donde Sandoval no apareció.
Son recordadas sus ausencias sin justificación alguna cuando Paolo Montero era el DT, lo mismo ocurrió con Eduardo Domínguez, Esteban Fuertes, Marcelo Goux, Julio Comesaña y ahora con Lavallén.
Siempre se habló, en tanto, de la posibilidad inminente de emigrar al fútbol europeo. Incluso en las negociaciones que Colón entabló con Bayer Leverkusen por el pase de Lucas Alario se tiró en la mesa el nombre de Sandoval.
Y ahora su representante Manuel Montaño llegó a un acuerdo con Pedro Aldave, para que intente colocar al delantero en el fútbol europeo, donde tres equipos pican en punta.
Uno de los equipos que se mostró interesado en el atacante es del fútbol griego, mientras que también hay dos italianos. De los tres, quien más chances tendría de sumarlo es el Udinese, que milita en la Primera División de la Serie A del Calcio.