Ya no se puede lamentar por el pase de Patricio Rodríguez o la actuación pobre de este domingo. Los tanteadores finales son los que valen: 70-69 y 94-58 para Central Argentino Olímpico de Ceres en el Raúl Braica, que le permite a la formación de Enrique Lancelotti viajar con mucha tranquilidad al Ángel Malvicino.
Sabe el debutante en la divisional que en el peor de los casos tendrán un desempate en un territorio firme(ganó 21 de los 22 partidos que disputó, con 17 victorias en fila).
A Unión se le presenta por cuarta vez (tercera al hilo) esta situación de pisar su casa con la soga al cuello. La primera fue en la temporada 2014/15, cuando Ferro lo eliminó en los cuartos de final nacionales. El Tren se impuso 85-69 en el Héctor Etchart (18 Rasheem Barrett) y 95 a 78 (22 Rasheem Barrett), el 13 y 15 de abril. La serie vino a Santa Fe y los rojiblancos metieron el descuento, al imponerse 80-73 el 20 de abril, con 22 del salteño Miguel Isola.
Pero llegaría el cuarto punto y aquella recordada última bola en las manos de Leandro Vildoza para poner llevar la serie a un desempate. El tiro pegó en el aro y los de Caballito sentenciaron la serie 3-1, con el 72-70, el 22 de abril, a pesar de los 23 puntos de Pedro Franco.
En la temporada 2016/17, Unión edificó lo que hasta el momento es su mejor campaña en el máximo certamen de ascenso. Se topó en semifinales de Conferencia Norte con Comunicaciones de Mercedes, que después terminaría ascendiendo. En Corrientes el equipo de Tulo Rivero se impuso 89-81 (16 de Barovero) y 85-80 en dos tiempos suplementarios (16 de Barovero), el 5 y 7 de mayo. Vinieron a Santa Fe y los pupilos de Daniel Beltramo emparejaron la situación: 81-74 (Barovero 17) y 80-78 (Barovero 21), el 10 y 12 de mayo.
Entonces nuevamente hubo que viajar a Mercedes y en un partido que se recordará por su resolución, los rojiblancos cayeron 73-71 el 15 de mayo. Era 3-2 con el Tate y la victoria al alcance de la mano pero una fallida salida lateral le permitió correr y anotar al hoy jugador rojiblanco, Matías Aristu, para transformar la decepción local en alegría desbordante.
Lo más reciente sucedió en la temporada anterior, ya bajo la denominación de Liga Argentina. Unión debía eliminarse con Hindú de Resistencia y estuvo muy cerca de traerse el primer punto, aunque perdió 72-69 el 25 de abril (Mariani 18). Dos días después el Bólido Verde no dejaría dudas y establecería el 2-0 tras golear a los santafesinos por 92 a 65 (Mariani 19).
La serie vino al Ángel Malvicino y el equipo que orientaba Juan Francisco Ponce lo empató al playoffs con triunfos por 73 a 64 (Mariani 17) y 80-72 (Rodrigo Sánchez 18), el 30 de abril y 2 de mayo. Entonces todo se resolvió en la capital chaqueña e Hindú goleó a Unión 94-72 el 5 de mayo, a pesar de los 24 de Andrés Mariani. Era la despedida de aquella campaña irregular, con muchos cambios de extranjeros y dos técnicos.
Ahora, por cuarta vez desde que disputa el máximo certamen de ascenso, viniendo de la peor caída en el historial (lleva 262 partidos oficiales en esta divisional), Unión sabe que tiene poco tiempo para modificar cosas y sin margen de error si pretende avanzar en la Conferencia Norte.