Colóne está ante la gran chance de conseguir su primera estrella, cuando el próximo sábado en La Nueva Olla enfrente a Independiente del Valle, pro la final de la Copa Sudamericana. Para Marcelo Estigarribia será un partido único, distinto, a pesar de tener un extenso recorrido en el fútbol internacional, donde por ejemplo fue campeón con la Juventus de la Serie A de Italia.
“Dos años atrás no estaba en el ruido, pero hace un juego que lo hago con una regularidad. Me siento importante en este grupo, en este equipo y en la ciudad”, comentó el futbolista desde Santa Fe a ABC.
Estigarribia sabe lo que genera una final o una definición. Vivió un título con la Juventus de Turín en 2012. Pero fue otra época y no compara con la Sudamericana. Si decide elegir, abraza el trofeo sudamericano, que tiene un condimento. La final es en su país y en su casa, donde se formó como jugador y debutó en primera en 2006. “No cambiaría por nada la Sudamericana. Es lo que me toca ahora. Soy un privilegiado. Las cosas no pasan por si solas. Todo está escrito en esta vida. Es algo muy lindo porque es una final y más todavía que se juega en Paraguay y en La Nueva Olla”, añadió.
A sus 32 años y rodeado de la familia (esposa e hijas), el paraguayo disfruta el momento sin cargarse con la presión. “Me agarra con mucha más madurez y trato de disfrutarlo antes que meterme como una presión. Disfruto porque es algo muy lindo, es una final histórica y en mi caso porque se juega en mi país. Ahora es como que me siento en mi plenitud. Con una calma emocional que no la tenía antes”, expresa el extremo.
“En el fútbol hay más momentos tristes y duros y los momentos como este son pocos. Además, duran muy poco”, agregó.
Estigarribia es un agradecido y destaca en cada oportunidad que habla del club argentino, de la gente y de la ciudad. Expresa sentirse importante, respetado, valorado y privilegiado. En un momento así, el piensa en la familia. Sabe que, como toda persona, su esposa e hijas son el sostén diario. “La familia es la base de todo jugador. La tranquilidad que me dan mi señora e hijas. Son el sostén de mis cosas. Cuando no estaban bien, ellas me decían que siga. Siempre recuerdo a mi señora e hijas como también a mis padres”, puntualiza.
Pese a tener la final como prioridad y la mirada en el 9 de noviembre, Estigarribia tiene en el corazón a Cerro Porteño y a la selección paraguaya. No cree en la revanchas, pero desearía otra oportunidad en la Albirroja. “Revancha no la tendría en ningún lado, ni en Cerro porque me fui con la mayor ilusión y no sucedió lo que pretendía. Son cosas que uno pasa en el fútbol. Gracias a eso es que hoy estoy acá, disfrutando una final de Copa Sudamericana. Te puedo decir que si la cosa estaba bien en Cerro, yo no iba a estar jugando esta final de Sudamericana”, cuenta.
Y continúa: “Quiero volver a vestir la camiseta de la Albirroja. Después de la lesión en 2014 ya no tuve la oportunidad de jugar. Me gustaría volver a vivir la sensación de la selección. Pero tampoco es mi meta. Haciendo bien las cosas acá, el tema de selección se hace más fácil. Si tengo la posibilidad de jugar en la selección, con mucho gusto. Agradecería infinitamente. Mi prioridad es Colón y el tema selección viene solo”.
Pero Estigarribia vuelve a la realidad. Vive en las afueras de la ciudad de Santa Fe, desconectado del ambiente ansioso de los hinchas. El General Pablo Rojas tendrá una mayoría argentino por arraigo y distancia. “Es un plus tener una hinchada que te apoye. Mas de treinta mil personas irán a la cancha y es algo muy lindo. La gente se prepara y está muy entusiasmada. Se crea un ambiente de fiesta”, afirma.
Destaca la humildad, la unidad del equipo y tener el objetivo enfocado y que todos van por ese reto. Dejamos de lado los objetivos personales por los grupales. Dejamos mucho de lado nuestro ego. Siempre creímos que podíamos lograrlo y ya estamos a un paso”, sentencia sobre el resto de sus compañeros, que desean quedar en la historia del club, que disputará su primera final internacional en 114 años de vida. “Queremos coronar esto con el título”, culmina Estigarribia.