Dos episodios prácticamente iguales tuvieron lugar entre los últimos minutos del lunes y los primeros del martes en Santo Tomé: desconocidos arrojaron granadas de gas en viviendas.
Ahora, se pudo saber que una de las propiedades pertenece al padre de un miembro de la comisión directiva de Luz y Fuerza, y la otra a un integrante actual de la misma. De esta forma, es de suponer que los violentos episodios tienen como motivación una interna sindical.
Por LT10, una de las víctimas confirmó esa suposición. Se trata de José Luis Taborda, secretario de Hacienda del mencionado gremio.
“El lunes un poquito antes de la medianoche escucho un ruido de roturas de vidrio. Salgo a ver de qué se trataba y había un vidrio del portón de la cochera roto y un artefacto en el piso. Intenté sacarlo hacia la calle, agitado y sin saber lo que era. El 911 constató la situación: era una bomba de humo que no se había activado”, relató.
El sindicalista calificó el hecho como “triste” y dijo que no es el único que desde hace un tiempo a esta parte vienen sufriendo las autoridades de Luz y Fuerza. “Se ve claramente una cuestión de amedrentamiento hacia algunos miembros de la CD de esta institución”, lamentó.
“Es una situación muy llamativa que nos tiene desconcertados”, aseguró, y añadió que durante el proceso eleccionario que se celebró en el gremio en diciembre de 2019 no hubo oposición, y que actualmente tampoco la hay, al menos de manera formal.
En cambio, sí se ha producido una campaña de difamación contra autoridades, ya sea mediante la distribución de panfletos o vía redes sociales. “Pero esto -por el arrojamiento de granadas- ya tiene un grado de agresividad preocupante”, reconoció y añadió: “nunca ha pasado esta situación de tal magnitud y con tanta agresividad y todos hechos realizados desde el anonimato, desde la oscuridad, de manera violenta”.