A los jugadores de Unión se les terminaron las vacaciones y este lunes volverán a encontrarse en Casasol, para iniciar la pretemporada, la cual tendrá como punto de partida exámenes físicos y médicos.
Se espera la presencia de Gustavo Munúa, quien hace un par de semanas le dio el visto bueno a la propuesta que le hizo el club, más allá que se aguarda por su arribbo a Santa Fe para que firme su contrato, el cual lo unirá hasta el 31 de diciembre del año que viene.
Es una incógnita lo que ocurrirá con varios de los jugadores a los que se les termina el contrato el 31 de diciembre, como son los casos de Santiago Mele, Sebastián Moyano y Claudio Corvalán.
En ese sentido, cada vez es más incierto saber si Unión podrá adquirir a Mele, ya que el Banco Central no autiza a sacar dólares del país a valor oficial, mientras que la alternativa de una venta la cual sirva para afrontar dicha inversión parece bastante lejana.
En tanto que Corvalán ya habría dado el visto bueno para firmar su nuevo contrato, el cual sería anunciado en las próximas horas y sería por dos temporadas, como quería el defensor. Mientras tanto, se esperan novedades similares con el arquero Moyano, sobre todo por las dudas que hay en torno a Mele.
Los otros jugadores a los que se les termina el contrato seguramente no dirán presente, como son los casos de Diego Polenta, Jonatan Álvez, Facundo Agüero, Sebastián Jaurena y Mariano Peralta Bauer, aunque sí lo podría hacer Leonel Bucca, que está cada vez más lejos de renovar su contrato con Unión.
Se sabe que Munúa, más allá de tener como condicionamientos las continuidades de jugadores clave y la no venta de juveniles a los que pretende seguir potenciando y sacarle el jugo, también necesita en el mercado de pases dos marcadores centrales de jeraquía y experiencia, uno o dos volantes centrales y dos atacantes.