Los gobiernos de Argentina, Colombia, México y Bolivia pidieron la restitución de Pedro Castillo a la presidencia de Perú luego de su intento de disolución del Congreso, que lo llevó a su detención y destitución y a la asunción de su vicepresidenta, Dina Boluarte, al frente del Ejecutivo.
En un comunicado conjunto, expresaron su "profunda preocupación" por la situación e hicieron "un llamado a todos los actores involucrados en el anterior proceso para que prioricen la voluntad ciudadana que se pronunció en las urnas".
"Para el mundo no es novedad que el presidente Castillo Terrones, desde el día de su elección, fue víctima de un antidemocrático hostigamiento, violatorio del artículo 23 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, Pacto de Costa Rica, aprobada el 22 de noviembre de 1969, para luego ser objeto de un tratamiento judicial de la misma manera violatorio del artículo 25 de la mencionada convención", expresa el comunicado que difundió Cancillería.
Y expresaron: "Nuestros gobiernos hacen un llamado a todos los actores involucrados en el anterior proceso para que prioricen la voluntad ciudadana que se pronunció en las urnas. Es la manera de interpretar los alcances y sentidos de la noción de democracia recogida en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Exhortamos a quienes integran las instituciones de abstenerse de revertir la voluntad popular expresada con el libre sufragio".
Finalmente, pidieron a las autoridades peruanas que "respeten a cabalidad los derechos humanos del presidente Pedro Castillo" y que se le garantice la protección judicial en los términos consagrados en el artículo último citado.