La política de contratación de River en los últimos mercados de pases, al menos con aquellos fichajes que legaban con más pergaminos, ha girado en torno a la misma estrategia: permitir el regreso de exjugadores destacados del club. Así es como llegaron Pity Martínez, Ramiro Funes Mori, Manuel Lanzini, entre otros.
Recientemente, Erik Lamela le puso punto final a su ciclo como futbolista de Sevilla y los rumores sobre un regreso a River no fueron difíciles de disipar, teniendo en cuenta que el futbolista está identificado con el club con el cual descendió en 2011 e inmediatamente después fue vendido a la Roma.
Lamela, de 32 años, arribó este jueves al país tras despedirse de su club y luego de que haya finalizado su temporada en LaLiga. En el aeropuerto mismo, fue consultado por una posible llegada al Millonario. "A River siempre lo llevo en mi corazón pero lo primero que quiero es recuperarme y estar bien", señaló primero.
Sin embargo, luego dejó todo un guiño para la dirigencia. "Hasta ahora no me llamó nadie, vivo el día a día y mi intención es poder volver bien", señaló. De hecho, confirmó que el único club en el que jugaría en Argentina es el Millonario.
El mediapunta con pasado en Roma y Tottenham se recupera de un esguince leve del ligamento lateral interno de la rodilla derecha, que sufrió a principios de mes. Recién comenzará a correr para ponerse bien físicamente.
Por último, Lamela dejó una definición sobre el River de Martín Demichelis: "Me gusta este River, consiguió tres títulos y creo que hay que respetarlo y bancarlo".