La Confederación Argentina de la Mediana Empresa publicó su informe mensual en el que da cuenta de que la actividad manufacturera de las pymes disminuyó 20,4% anual en junio y acumula una retracción de 19,2% en el primer semestre del año frente al mismo período de 2023. En tanto, en la comparación mensual desestacionalizada, la actividad también declinó 3,1%.
Los datos surgen del Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) que elabora la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), con una muestra que alcanzó a 420 industrias pyme a nivel federal.
El 35,6% de las empresas consultadas señalan que la medida más esperada en este momento sería una reducción de impuestos, mientras que otro 14,6% menciona la flexibilización de las normativas laborales. Se tratan ambas de políticas que permitirían reducir los costos y mejorar la rentabilidad.
En la lista de prioridades, el tercer lugar de medidas esperadas lo comparten el estímulo a la demanda interna y los créditos blandos, en los dos casos mencionadas por el 13,6% de las industrias consultadas.
En cuanto a las problemáticas y desafíos, el 43,4% de los encuestados menciona la falta de venta, otro 34,9% los altos costos de producción y logística, y 11,1% las dificultades de acceso al crédito
Por sectores
Los seis sectores manufactureros del segmento pyme tuvieron fuertes caídas en la comparación anual, siendo los más afectados “Papel e Impresiones” (-31,5%) y “Químicos y plásticos” (-30,3%).
- Alimentos y Bebidas: El sector registró una caída de 17,4% anual a precios constantes en junio y de -4,8% en la comparación mensual. Las empresas consultadas manifestaron que el mes se vio perjudicado por los feriados y los vaivenes macroeconómicos. Algunas observan señales de reactivación esporádicas que luego se interrumpen. No se detectaron este mes mayores problemas con el abastecimiento de insumos.
- Textiles: La producción se retrajo 7,4% anual en junio y -4,3% frente a mayo. Para el primer semestre del año acumula una caída de 2,7%.Se detectaron más cierres de empresas, y un incremento en el temor por la pronta liberación de importaciones, de acuerdo con algunos anuncios oficiales. Empresarios consultados creen que se acabó el veranito para la actividad, y comienzan a pensar en cómo se acomodarán frente a un eventual contexto de menor demanda permanente.
- Madera y Muebles: En junio, el sector se retrajo 20,7% anual a precios constantes, y -3% en la comparación mensual desestacionalizada.
- Químicos y plásticos: En junio, el sector experimentó otra significativa contracción de 30,3% anual a precios constantes, y de -2,3% en la comparación mensual. Las empresas exportadoras son las que mejor están afrontando la crisis actual, mientras que el resto no vislumbra señales de reactivación en el horizonte cercano y ven peligrar sus fuentes de empleo. Los empresarios consultados sostienen que se hacen muy necesarias medidas para bajar los costos, y especialmente reclaman por el fuerte incremento en los precios de la energía.
- Papel e impresiones: La actividad se retrajo 31,5% anual a precios constantes, siendo nuevamente el sector con mayor retroceso. Frente a la falta de rentabilidad y una coyuntura que hace tiempo le viene dando la espalda a este sector, varias empresas comenzaron a planificar la incorporación agresiva de tecnologías para digitalizar y automatizar procesos, lo que les permitiría reducir costos. El principal obstáculo para consolidar esa decisión es la falta de financiamiento.