En un partido que parecía presentársele adverso prácticamente desde el inicio y con Alexis Mac Allister como titular, Liverpool dio una muestra de carácter y se impuso por 3-1 ante Milan, en uno de los duelos más especiales de la primera jornada de la UEFA Champions league
No comenzó de la mejor manera el partido para Liverpool, ya que una corrida de Christian Pulisic por el sector derecho del ataque italiano terminó con un remate cruzado y el 1-0 en favor de los de Paulo Fonseca, a dos minutos del primer tiempo. Así, la suerte parecía sonreírles a los locales, mientras en la visita, el entrenador, Arne Slot, pensaba de qué manera revertir el resultado.
Afortunadamente para él, la respuesta llegó veinte minutos después, con el gol del empate desde la cabeza del defensor Ibrahima Konaté, tras un certero centro de tiro libre por parte de Trent Alexander-Arnold. Como si esto fuera poco, a los 40 minutos fue Virgil Van Dijk quien, también de cabeza, puso a los Reds al frente en el marcador.
La diferencia terminaría siendo un poco mayor en el complemento, con un Liverpool decididamente en búsqueda del gol que le permita tomar distancia en el marcador y con un Milan que no encontraba respuestas. Así, a los 21 minutos y tras una gran corrida de Cody Gakpo, Dominik Szoboszlai conectó un centro con su pierna derecha y estampó el 3-1 final.
De esta manera, Liverpool se quedó con sus primeros tres puntos en el nuevo formato de la Champions League, en un duelo que además significaba la reedición de una vieja final. Ahora, su próximo partido será ante Bologna, el 2 de octubre. Para Milan, por su parte, el arranque fue con el pie izquierdo y deberá buscar levantar cabeza el 1 de octubre, ante Bayer Leverkusen