HD, Full HD, 4K, es decir, cuatro veces Full HD, y Ultra HD Premium. La tecnología no se detiene y, una vez más, es prácticamente imposible que el usuario la alcance.
El Ultra HD Premium no es nuevo, pero recién ahora ese nombre será más frecuente. Aprobado por la Alianza UHD, formada por los principales fabricantes, se basa en el HDR (rango dinámico ultra-alto) presente en las cámaras digitales desde hace años.
El HDR tiene por objetivo mejorar la imagen, ya sea "limpiando" el exceso de luz o bien mejorando el resultado de la toma en caso de ambientes oscuros.
El resultado de sumar HDR a las pantallas 4K es una mejor calidad de imagen gracias a que ofrece un mayor nivel de brillo, contraste y colores más vivos.
Al igual que sucede con el 4K, los televisores con ese estándar pueden mejorar la imagen que reciben para darle mayor calidad.
Los televisores presentados en CES 2016 cubren ese estándar y por ello, al igual que los que serán lanzados a lo largo del año, deberán llevar un sello especial para garantizar al usuario su funcionamiento.