Ayer, 2 de abril de 2019, Google despidió de forma definitiva a Inbox, una aplicación de correo móvil, además de Allo, una plataforma de mensajería que buscaba competir con Whatsapp.
Google + también se desconectó: el fallido experimento de red social que buscó implantar el gigante informático norteamericano.
En 2016 Google presentó Allo, una plataforma de mensajería que buscaba competir con WhatsApp, sin embargo la empresa del buscador más utilizado del planeta llegó tarde y no logró establecerse dentro del mercado de las aplicaciones de mensajería.
Este se suma a otras aplicaciones fallidas de los magnates de internet, como Google Talk, Hangouts y Google Wave.
Google, en al actualidad, busca trabajar en el desarrollo de los RCS (Rich Communications Services) a través de Android Messages. Un producto que se asemejará al establecido por Apple, con mensajes entre los equipos de su ecosistema.
La red social de la casa de Youtube, Drive y Gmail, cerrería tras un fallo de seguridad que ha dejado expuestos los datos de más de medio millón de usuarios. Dicha filtración sería el último clavo en el ataúd para una aplicación que, según sus creadores, no lograba mantener más de 5 segundos inmersos al 90% de sus usuarios.