Cada vez son más los usos que se le da al celular y, si bien se sabe de los daños que puede ocasionar en distintos aspectos, es uno de los objetos que más se utilizan a diario. A continuación, diez formas en las que puede afectarnos.
1- Primero, las buenas noticias: El celular como protección. Un estudio en Journal of Emergency Medicine que analizó diligencias de emergencia a lo largo de 11 años, reveló que se salvaron 137 vidas más por cada 100.000 pacientes cuando se llamó al 911 desde un teléfono móvil en vez de una línea fija.
2- Revisar el teléfono justo antes de acostarse podría perturbar el sueño. La luz de onda corta azul brillante que emite aumenta la atención durante el día, pero en la noche podría inhibir la producción de melatonina, que ayuda a dormir. Para evitarlo, acostumbrate a no usarlo al menos 30 minutos antes de acostarte.
3- Cuando estás despierto, un solo zumbido indicando que tiene una notificación en el teléfono podría debilitar tu capacidad de concentración.
4- Dejar tu teléfono de lado cuando estás solo (en vez de sacarlo para jugar) podría inspirar ideas creativas. “El aburrimiento activa cuatro áreas distintas del cerebro que funcionan conjuntamente para atraer pensamientos fortuitos y combinarlos de maneras singulares,” explica el psicólogo Larry Rosen, autor de The Distracted Mind.
5- Actualmente, el usuario medio pasa más de cinco horas al día deslizando, escribiendo, pulsando y sintiendo malestares por ello. El “codo de selfie” es una lesión por esfuerzo que proviene de mantener el codo en un ángulo exagerado, y 85.000 personas al mes buscan “pulgar en gatillo” y términos parecidos en Google (solo en Estados Unidos).
6- La mayoría de celulares nadan en gérmenes, diez veces más de los que encontraría en muchos inodoros. Limpiá su teléfono todos los días con una toallita antibacterial apta para aparatos electrónicos o con un paño de microfibra.
7- Dicho esto cabe anotar que tu celular también ayuda a estar más sano. En un estudio con voluntarios con sobrepeso, aquellos que utilizaron una aplicación para teléfonos inteligentes en la que registraron su consumo de comida fueron mucho más perseverantes que quienes usaron un cuaderno o un sitio web para perder peso; además, perdieron más kilos.
8- La exposición a la radiación, que por mucho tiempo se pensó era un riesgo para los usuarios intensos del celular, seguramente no sea un factor muy preocupante. Los teléfonos inteligentes sí emiten radiación, pero la mayoría de evidencias científicas no vinculan su uso con cáncer.
9- Orientarse por medio de un mapa y tratar de recordar la ruta podría ser mejor para el cerebro que depender pasivamente de las instrucciones minuciosas del GPS del auto. Los científicos han detectado que en los adultos mayores que eligen el sistema más activo aumenta la actividad del hipocampo, una parte del cerebro importante para la memoria.
10- Tomar una foto con celular también podría afectar tu memoria. En una prueba efectuada después de una visita a un museo de arte, era menos probable que los alumnos recordaran objetos que habían fotografiado.