Siempre se dice que las estadísticas no definen nada, pero si clarifican algunas cosas. En este caso, muchos no se dieron cuenta de un datos de color más que interesante en Unión en el partido de este sábado ante Talleres: estuvieron concentrados siete jugadores de las divisiones inferiores.
Desde hace algunas temporadas se viene apostando fuerte a esta iniciativa. No solo para fortalecer el patrimonio de la institución sino también para hacer crecer el sentido de pertenencia. En este caso, de la mano de Leonardo Madelón muchos pibes encontraron el incentivo de jugársela y un fiel reflejo de esto se dio en esta temporada.
Ellos fueron: Marcos Peano, Franco Calderón, Lucas Ríos, Brian Blasi, Gastón González, Franco Godoy y Juan Ignacio Nardoni. Podría sumarse a Juan Ignacio Cavallaro, que ya tiene un recorrido más amplio en Primera División que ascendería a ocho la cifra.
Obviamente que todavía no todos lograron ganarse la titularidad, pero es un espaldarazo saber que hay un proyecto y una apuesta concreta que va por un camino paulatino.