En las últimas horas, se anunció que la ordenanza que dispone la alcoholemia cero al volante para la ciudad de Santa Fe comenzará a regir el 16 de febrero. Consultado al respecto, el subdirector de la Agencia Provincial de Seguridad Vial sorprendió al manifestarse en contra de esa medida.
"Es un buen título, con las mejores expectativas para la sociedad, pero después nadie se hace cargo de las reales consecuencias de los títulos", dijo Osvaldo Aymo, en diálogo con De Diez. "El que toma no conduce y el que conduce no toma. Eso está claro. Pero el tema de una legislación que vaya a punir a las personas que están conduciendo con entre 0 y 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre no (coincide) con el objetivo que todo el mundo plantea, que es bajar (la cifra) de muertos y heridos graves en accidentes de tránsito", afirmó.
En ese sentido, insistió: "¿cuál es la cantidad de accidentes con víctimas en conductores con entre 0 y 0,5 g/l? Yo te digo: no hay", sostuvo, categórico.
Para Aymo, la solución pasa por saturar las calles y rutas de controles. "Si todos los países del mundo hicieran entre 300 y 400 controles cada mil habitantes, como hacen los nórdicos, no tenés que tocar el 0,5". Además, cuestionó: "si tenemos todavía gente con 1,3 g/l es porque no pudinos con el 0,5. Si no hay controles, no sirve", insistió.
Por ello, su decisión como titular de la APSV es "inundar la provincia de controles de alcoholemia y (hacerlos) en cualquier momento, no solamente el viernes o el sábado a la noche, o en la madrugada del domingo. Hay que instalar en la sociedad el hecho de que te van a controlar", evaluó.