El coronavirus se convirtió en pandemia y eso quiere decir que en poco tiempo, la enfermedad se extendió en todo el planeta. Claro que esto automáticamene obligó a tomar medidas drásticas como jugar partidos a puertas cerradas o cancelar por tiempo indefinido hasta la misma NBA.
En Salerno, Italia, a muchos kilómetros de distancia, Lucila Cragnolino padece esta incertidumbre de no poder regresar a nuestro país. Fue para jugar por unos meses en el equipo de la ciudad y su idea era fichar en Corrientes Básquet para la Liga Femenina, pero no se sabe si eso finalmente ocurrirá.
Desde su domicilio contó todo lo que está viviendo en un presente crítico. En el inicio reconoció que “la verdad estoy bastante asustada, hay mucha información que corre todo el día, estoy sin poder entrenar y jugar, sin saber si puedo volver a mi casa, una confusión grande como la mayoría de la población, nadie tiene certezas de nada y te genera una sensación de inseguridad”.
Más adelante expresó que “nosotros teníamos que jugar el último partido de fase regular después de un cambio de técnico el 29 de febrero en Caserta, anunciaron horas antes un caso, se suspendió una semana, después otra, las escuelas cerradas como los lugares públicos, bares y conciertos seguían, no podíamos jugar al básquet pero si ir a un Shopping, hace una semana se suspendieron todos los entrenamientos, no hay lugares para entrenar deportes de conjunto, más allá de todo esto la movida del gobierno es que todos se queden en las casas”.
La ex-jugadora de CUST afirmó en diálogo con unosantafe que “cada día que pasa es más difícil, se cancelan viajes una compañera en el norte de Italia le cancelaron en horas tres vuelos, el mismo vuelo me lo cancelaron a mí el próximo sábado, de Roma a Buenos Aires es la única vía, hoy una compañía te deja sacar el billete pero después te lo cancela”.
Hace pocos días se presentó una nueva edición de la Liga Femenina, que tendrá el estreno de Corrientes Básquet, elenco que ya tenía un acuerdo de palabra con la interna para poder contarla entre sus filas. Al respecto, Luci enfatizó: “Es una de las cosas que más me preocupa, quería terminar acá en Italia y llegar entrenada y con roce, jugando playoffs, para fichar en Corrientes, por una cuestión de tiempo se dice que hasta el 3 de abril no se sabe que pasará con la competencia. Mi idea es volver a Argentina, tengo que afrontar la cuarentena cuando llegue, la situación se tornó complicada, espero que se pueda resolver por mis ganas de regresar”.
Al momento de narrar en primera persona lo que es un día sin básquet y con el coronavirus avanzando a pasos agigantados en Italia, Cragnolino sostuvo que “la ordenanza del gobierno es quedarse en casa, los negocios algunos están abiertos, otros cerrados con una marea de gente que sale preocupada, algunos sin precauciones o mucho miedo, la gente se comporta de manera extraña, lo mejor es ir al mar, a alguna plaza, con sol y aire, lo intentamos con compañeras, pero después hay que leer mucho, o hacer un poco de gimnasia para mantenerse en forma”.