El gobierno de Brasil anunció este jueves el cierre de sus fronteras por vía terrestre con la Argentina, Bolivia, Guyana Francesa, Colombia, Guayana, Paraguay, Perú y Suriname (ya la había cerrado con Venezuela días atrás) en una de las primeras medidas que adoptó el presidente Jair Bolsonaro para intentar frenar el avance del coronavirus Covid-19 en el gigante latinoamericano.
Tras informarse de manera oficial la elevación a seis de la cantidad de víctimas fatales provocadas por el coronavirus, Brasil adoptó la medida que por ahora estará vigente por los próximos 15 días. Así Brasil se cerró al ingreso por vía terrestre de extranjeros, con excepción del Uruguay.
La decisión fue tomada de manera conjunta por los ministerios de Defensa, Justicia, y la Casa Civil de la Presidencia (una suerte de Jefatura de Gabinete).
La decisión no afecta a ciudadanos brasileños tanto nacidos en el territorio de ese país como naturalizados. Tampoco a los extranjeros con residencia definitiva en Brasil, profesionales que se desempeñan en organismos internacionales e integrantes de cuerpos diplomáticos.
El cierre de frontera no afectará el transporte de cargas por rutas de modo de no entorpecer el intercambio comercial con esos países ni a acciones humanitarias transfronterizas previamente autorizadas por el ministerio de Salud, ni el tráfico de residentes entre ciudades fronterizas.
Miles de brasileños se unieron anoche en un enorme cacerolazo para protestar contra la falta de acción de las autoridades de ese país ante el avance de la pandemia. Jair Bolsonaro, presionado por las circunstancias debió empezar a adoptar algunas medidas de contención luego de minimizar en reiteradas oportunidades la gravedad de la situación.