Álvaro Uribe, el líder más poderoso en la historia reciente de Colombia, fue puesto bajo arresto domiciliario mientras es investigado por un supuesto complot para sobornar a paramilitares encarcelados, según Blu Radio.
Uribe está siendo investigado por la Corte Suprema de Justicia por un supuesto complot para sobornar a testigos e incriminar a uno de sus opositores políticos. Dijo en un tuit que estaba profundamente entristecido por la pérdida de su libertad, sin dar más detalles.
La oficina de prensa de la Corte Suprema de Justicia no respondió a una solicitud de comentarios.
Fiscales acusan al expresidente Uribe de emplear intermediarios para manipular a exmiembros de milicias ilegales para que cambien sus testimonios en su contra y, en cambio, difamen a un senador de la oposición.
La investigación comenzó después de que grabaron a personas vinculadas a Uribe que aparentemente intentaban presionar a un exmiembro de un grupo paramilitar para que cambiara su testimonio. El testigo, Juan Guillermo Monsalve, dijo que Uribe y su hermano Santiago Uribe estuvieron involucrados en la creación de un grupo paramilitar en la década de 1990.
Uribe dice que Monsalve y otros testigos fueron sobornados por el senador opositor Iván Cepeda para acusarlo falsamente. Cepeda visitó a exparamilitares en la cárcel mientras desarrollaba el caso contra Uribe. Ha tildado las acusaciones de Uribe de cortina de humo.
Uribe fue presidente de 2002 a 2010, con una postura dura ante las guerrillas marxistas de la nación. Su influencia cobró tanta fuerza que logró elegir a su gusto a los siguientes dos presidentes de la nación, Juan Manuel Santos —con quien luego partió caminos— y el mandatario actual, Iván Duque.