El Tribunal Oral Federal de Santa Fe, integrado por José María Escobar Cello, Luciano Lauría y María Ivón Vella, dictó este jueves penas de hasta 15 años de prisión a nueve integrantes de una organización dedicada a la comercialización y transporte de cocaína y marihuana. Durante el juicio intervino el fiscal general Martín Suárez Faisal, quien en su alegato postuló condenas similares a las impuestas, en tanto que la investigación en la etapa de instrucción estuvo a cargo del fiscal federal Walter Rodríguez.
Las penas, que se dieron a conocer en el mediodía de hoy, fueron de 15 años de prisión para el funcionario de la Brigada de Orden Urbano de la policía de la provincia de Santa Fe, Edgardo Baigoría, como autor de los delitos de organización del comercio ilícito de estupefacientes y tenencia con fines de comercialización, agravado por su calidad de funcionario público y la cantidad personas intervinientes; de nueve años de prisión para Emanuel González, como partícipe secundario de esos hechos; de seis años de prisión para Estela Castillo, Osvaldo Salva y Cristian Mansilla como responsables de la tenencia con fines de comercio; y de cuatro años de prisión para Jorge Correa, como encargado del transporte de estupefacientes.
A su vez, los jueces condenaron a los gendarmes Damián Sosa, con cuatro años de prisión por ser autor de encubrimiento, agravado por haber actuado con ánimo de lucro y por su calidad de funcionario público; y a Santiago Alejo e Ismael Britos, con tres años de prisión a cada uno, por partícipes necesarios de ese delito.
Además, recibieron una inhabilitación especial para ejercer cargos públicos por el mismo tiempo que dure la condena.
El veredicto -cuyos fundamentos se conocerán el 4 de marzo- incluyó también el decomiso de una camioneta, del dinero secuestrado en procedimientos realizados durante la pesquisa y multas para los principales acusados.
La actividad de la organización criminal
La organización, dirigida por el policía Baigoría y su socio González, obtenía la droga principalmente desde Paraguay y de las provincias limítrofes, a donde viajaban asiduamente para luego comercializarla en la ciudad de Santa Fe. Al contar con fondos, con contactos -nacionales y extranjeros- y con la logística necesaria para transportar estupefacientes, la banda logró traficar, desde fines del 2015 hasta principios del 2018, casi 40 kilos de cocaína y media tonelada de marihuana, que en parte, lograron ser secuestradas en numerosos procedimientos y allanamientos realizados en diferentes puntos de Santa Fe y el resto del país.
Una investigación con ramificaciones en varios puntos del país
La pesquisa comenzó a partir de una denuncia anónima por narcomenudeo en Santa Fe y Santo Tome. La imputación se produjo en 2018, y estuvo centralmente a cargo del fiscal federal N°2 de Santa Fe, Walter Rodríguez, que identificó a unas veinte personas vinculadas a la organización: nueve fueron las hoy condenadas, y otras que ya fueron encontradas responsables o esperan otros juicios orales. Asimismo, durante su alegato Suárez Faisal reparó por ejemplo en la vinculación de Baigoría y González con el padre del fallecido Martín “Fantasma” Paz, asesinado a sangre fría por “Los Monos".
EL fiscal del tribunal oral federal de Santa Fe, Martín Suárez Faisal, expresó por LT10 que “se comprobó que esta banda tenía vínculos estrechos con la organización rosarina liderada por Paz, con un condenado en Paraná de apellido Caudana y con una mujer de Santa Fe apellido Melgarejo, que está prófuga de la justicia (hay una recompensa de un millón de pesos)”.
Además, Martín Suárez Faisal agregó que “hay que destacar que el grueso de la investigación estuvo a cargo de la gendarmería nacional. La misma fuerza hizo el trabajo de depuración. También, se sumó la policía federal y la policía de investigaciones de la policía de Santa Fe. Es importante remarcar que no todas las fuerzas de seguridad están en actividades ilegales como este gendarme”.