El FMI mejoró sus previsiones de crecimiento para la Argentina, que según estimó será de 5,8% este año, más de un punto por encima de la proyección que había difundido en febrero pasado.
En 2022, el PBI argentino crecerá también, pero de manera más moderada: 2,5%, según el informe Perspectivas Económicas Mundiales (WEO) que el Fondo Monetario difundió este martes desde Washington.
En febrero de 2021, el organismo había estimado que la economía local se recuperaría 4,5%, pero ahora revisó esa proyección, para ubicarla en 5,8%.
Ese porcentaje está por debajo de lo esperado por el Gobierno: recientemente, el ministro de Economía, Martín Guzmán, vaticinó que el PBI crecerá 7% este año.
La economía argentina viene de caer un 9,9% en 2020, a raíz de la pandemia y de las restricciones que se tomaron para enfrentarla.
Si se cumple el último pronóstico del Fondo Monetario, el Producto Bruto de la Argentina estaría 1,4% por debajo del nivel de 2019.
Además, el informe del organismo indicó que la cuenta corriente del balance de pagos de la Argentina arrojaría un superávit equivalente a 2,3% del PBI en 2021, gracias a la recuperación económica mundial y la suba en los precios de las materias primas.
También, el Fondo aguarda una caída del desempleo en el país durante 2021: pasaría de 11,4% de la población económicamente activa registrada el año pasado a 10,6%; en 2022 caería a 9,3%.