El Abierto de Tenis de Estados Unidos anunció este viernes un cambio en sus normas y exigirá a todo el que quiera acceder al recinto del Billie Jean King, donde tendrá lugar el torneo, que presente una prueba de que ha recibido la vacuna contra la covid.
Según un comunicado remitido a los medios, cualquier persona mayor de 12 años tiene que haber recibido al menos una dosis, una medida que adopta siguiendo las recomendaciones del Departamento de Salud de la ciudad de Nueva York y "dada la continua evolución de la variante Delta".
En el texto, la Asociación de Tenis de EE.UU. (USTA), responsable del evento deportivo, explica que la decisión se produce a raíz de que la Alcaldía de Nueva York haya exigido vacunas para todo el que acceda al estadio Arthur Ashe, el más grande del Abierto y que tiene capacidad para albergar cerca de 24.000 personas.
Sin embargo, la USTA ha decidido extender esta medida a todo el recinto deportivo en el que se celebra el evento. La decisión se produce dos días después de que los organizadores del evento anunciaran unas laxas medidas de control de la pandemia, que contrastan con las del año pasado, cuando se prohibió completamente la asistencia del público.
Se supo que el torneo no iba a exigir a los fans un certificado de vacuna, una prueba de covid negativa, ni el uso de mascarillas en espacios exteriores, entre los que están todos los estadios, incluso en caso de cerrarse el techo por lluvia. Aunque ahora sí que será obligatoria la vacuna, la USTA tampoco tiene previsto tomar la temperatura de los asistentes.
"Hay confianza absoluta en los protocolos de covid de 2021, que han sido desarrollados por el consejo asesor médico de la USTA, siguiendo las reglas generales de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC)", dijo la directora del torneo, Stacey Allaster, que también subrayó que la tasa de vacunación en Nueva York es casi del 70 %.
Este año, los tenistas también tendrán unas medidas más relajadas, al tener la opción de alojarse fuera de los hoteles oficiales, y tampoco estarán obligados a hacer cuarentena a su llegada a Nueva York. Sí se les hará una prueba de covid a su llegada a la metrópolis, que se repetirá cada cuatro días, y los tenistas y sus equipos podrán visitar la Gran Manzana