Unión sufrió su tercera derrota consecutiva en el Torneo de la Liga Profesional, tras caer por 1-0 frente a Estudiantes, en La Plata, en un cotejo de la fecha 15.
De esta manera, el Tatengue pasó de la ilusión de pelear por los primeros puestos e ir en busca de un boleto para jugar la Copa Libertadores, a quedar rezagado en la tabla de colocaciones y quedar fuera de la zona de clasificación para los certámenes internacionales del año que viene.
Pero las derrotas consecutivas ante Argentinos en La Paternal, frente a Gimnasia en el 15 de Abril y contra Estudiantes en La Plata, rivales que marcarían para qué estaba Unión, tuvieron un denominador común: las tras se dieron sin convertir tantos.
Los dirigentes de Unión y la secretaría técnica encabezada por Roberto Battión salieron con la consigna de conseguir delanteros en el mercado de pases, como consecuencia de las lesiones reiteradas de Jonatan Álvez y la equivocada decisión de sumar a Leonardo Ramos.
Fue así que se sumó a Junior Marabel, quien en su debut marcó el tanto de la victoria ante Vélez y generó una gran expectativa. Esta se potenció ya que para el duelo siguiente ante Argentinos, en La Paternal, el DT también recuperó al lesionado Álvez.
Sin embargo, en el momento donde más alternativas tuvo en ofensiva Unión se secó, lo que representó derrotas, y que quedara razagado en sus grandes objetivos de este año. Es que el equipo acumuló en La Plata 273 minutos sin convertir.
De esta manera, en la semana de trabajos de cara al duelo ante Aldosivi del próximo domingo a las 20.30 en el 15 de Abril, el DT deberá trabajar no solo en consolidar al equipo en su sistema defensivo, debido a que viene de sufrir cinco goles en los últimos tres cotejos, sino también en potenciar a la faz ofensiva, donde con muchas alternativas se quedó seco.