Con la mira puesta en la integración regional, el ministro Massa, acompañado por Gustavo Pandiani y Marco Lavagna, parte de su equipo, propuso trabajar en una agenda bilateral entre ambos países.
Uno de los temas vinculados a la energía es lo que tiene que ver con la transición energética con el fin de descarbonizar el medio ambiente, de acuerdo a las metas fijadas, por todos los países del mundo, en los Acuerdos de París.
En línea con esta cuestión, el gas será protagonista, sobre todo para la Argentina, ya que a partir del yacimiento de shale gas de Vaca Muerta, el segundo en importancia en el mundo, la Argentina puede ser protagonista en la región, exportando gas para que tanto Brasil, como otros países puedan encarar la producción de energía a base de ese gas.
Otro de los temas de la agenda bilateral comercial, es el financiamiento del comercio exterior, debido a que por la crisis que se produjo en Europa por la guerra de Rusia con Ucrania, Argentina y Brasil pueden proveer al mundo, y a los mercados de oriente, de alimentos, que hoy escasean en esas regiones, y energía. En estas cuestiones, ambas comitivas coincidieron en que se trata de "intereses comunes entre ambos países".
Por otra parte, el segundo tema de la agenda fue reestablecer el normal funcionamiento de las relaciones bilaterales y la integración de ambas naciones, que se vio retrasada, durante el Gobierno de Jair Bolsonaro en Brasil.
En esta cuestión, se fijaron los objetivos de trabajar de cara al futuro en un intercambio de monedas y proyectar una moneda común. Proyectos que deben ser parte del proceso de integración económica, financiera, de infraestructuras y de desarrollo del Mercosur y la región.