El pasado martes 28 de mayo de 2019, Diez en Deportes informó que a partir del próximo campeonato, Colón dejaría de utilizar la indumentaria de Burrda Sport Argentina. Si bien es cierto que para la edición de la Copa Sudamericana de ese año se confeccionó una edición limitada de 1.200 ejemplares, el club no las reconoció como tal y por eso ante la Conmebol presentó la anterior.
La relación entre la institución y el dueño de la firma, Manuel Petrakosky, se fue quebrando a medida que fue pasando el tiempo a punto tal de terminar todo en vías legales. Los reclamos eran de los dos lados y todo se enfatizó en las últimas horas cuando el presidente, José Vignatti, reconoció que iría a la coyuntura la rescisión del contrato.
Fue a través de acciones legales encabezadas por Luis Hilbert, quien colabor´ó pese a formar parte de otra agrupación. Desde la confirmación de la sindicatura con miembros de todas las partes, una importante unión se fue gestando y, como lo que está por delante eran los intereses del Sabalero, no se dudó en ir a fondo.
En realidad, la relación entre Burrda Sport y Colón viene mal desde finales de 2018. Más que nada, cuando se supo que la marca no "era la que se creía". Cuando se aceptó el acuerdo, la empresa cuyo propietario es Manuel Petrakosky fue la mejor propuesta y estaba emparentada a la marca qatarí que viste a importantes equipos del mundo, sin embargo, no era así.
Luego se confirmó que Burrda Sport jugó su carta y rescindió el contrato que tenía vigencia hasta 2020. Lo hizo esgrimiendo como argumento la frustración de un contrato publicitario. Por el lado de Colón no se sorprendieron, pero no lo esperaban. Ante esto, Petrakosky llevó este cruce a vías judiciales.
Y en las últimas horas, como venía informando Diez en Deportes, se conoció que la justicia le dio la razón al empresario, por una cifra cercana a los 25.000.000 de pesos, con lo cual se prevé que habrá un emargo del dinero que debe recibir Colón por parte de la televisión.