El seleccionado sudafricano de rugby, que logró su cuarto título mundial el pasado sábado en Francia 2023, arribó hoy a Johannesburgo y fue recibido por una multitud.
A las 12 en punto (7 de Argentina), los campeones del mundo aterrizaron finalmente en Johannesburgo en una atmósfera incandescente: por la escalerilla del avión asomó su capitán Siya Kolisi con el trofeo William Webb-Ellis en sus manos.
Aclamado y bañado con agua y champán, el capitán de los Springboks cedió el dorado trofeo al gigante segunda línea Eben Etzebeth y luego pasó por las manos del hooker Bongi Mbonambi.
El aeropuerto se transformó entonces en una discoteca gigante, con varios éxitos del momento, embriagando al increíble público presente, señaló RugbyRama.
Kolisi, con la bandera de Sudáfrica en sus hombros, habló a continuación en una rueda de prensa: "Queremos dar las gracias a los sudafricanos. El torneo fue largo y duro, pero logramos ganar este Mundial una vez más. Las cosas han cambiado mucho desde 2019 (cuando ganaron el mundial de Japón) y hoy nos esperaban. Tenemos un equipo con mucha diversidad, con diferentes trayectorias y orígenes".
El capitán y símbolo del equipo, tras una infancia llena de carencias y hambre, agregó: "Este trofeo también es para todos aquellos que sufren y que viven con pocos recursos, en lugares difíciles. Quiero decirles a los niños de estos barrios que es posible, aunque no tengas zapatos o no tengas suficiente para vestir o comida en la mesa. ¡Es para ti!".
Sudáfrica, máximo ganador del certamen con cuatro títulos, venció en una durísima final en París a Nueva Zelanda por 12 a 11. En los restantes cotejos los sudafricanos le ganaron a Escocia (18-3), Rumania (76-0), Tonga (49-18), Francia (29-28) e Inglaterra (16-15) y en fase de grupos cayeron ante Irlanda (13-8).
Polideportivo - Rugby
Martes 31 de Octubre de 2023 - 11:43 hs
Los tetracampeones Springboks llegaron a Sudáfrica con la Copa del Mundo
A las 12 en punto (7 de Argentina), los campeones del mundo aterrizaron finalmente en Johannesburgo en una atmósfera incandescente: por la escalerilla del avión asomó su capitán Siya Kolisi con el trofeo William Webb-Ellis en sus manos.
Fuente: Télam