Este jueves, el entrenador de Unión, Cristian González, salió de la rutina y, antes del interzonal ante Independiente Rivadavia, brindó una conferencia de prensa en el predio Casasol luego del entrenamiento. No habló tanto justamente de este partido, sino del presente y la necesidad de "conectar de nuevo con la gente".
"Me sorprende la ansiedad, el nerviosismo y la exigencia que hay. Que se pretenda que a los 5 minutos ya se vaya ganando 2-0. La gente tiene que entender que como se transmite lo bueno, también lo malo y acá hay gente joven y a varios les pesa más que a otros. Pero esto recién empieza. Vivimos en un fútbol donde se toman decisiones apresuradas y no se da tiempo para esperar. Nadie te espera. No pasó un mes del partido con Racing y se puso la vara muy alta y seguimos ilusionados en que podamos repetir esa actuación. El fútbol argentino está viendo si el técnico se queda o se va y es una locura vivir así, por más que estamos expuesto y hay que entender que esto lleva tiempo. Comprendo a la gente y nosotros somo somos los primeros en querer ganar y en hacernos fuertes en casa. El año pasado peleamos el descenso y la gente se iba a aplaudiendo. Ahora no pasa y se está haciendo una fuerte autocrítica. Hay que asumir y estar a la altura de lo que nos jugamos en un torneo que no llegó ni a la mitad. Acá se gana y se pierde y las cosas cambian. Hay que seguir e insistir. Le pido calma a la gente y el sábado saldremos a ganar. Reconozco que no hicimos un buen partido el último y depende de nosotros transmitir algo desde adentro a la gente y confiamos en que lo recuperaremos", comenzó diciendo en una extensa charla con los medios.
Ante la consulta de LT10, Kily expuso: "Fueron seis partidos en 25 días donde nos caracteriza la intensidad. Hicimos un esfuerzo muy grande y tuvimos sobrecargas y lesiones. Ahí surge el desajuste y uno tiene que elegir. Veo el estado el ánimo, perdiendo quizás la confianza y el atrevimiento. Para mi es el mejor plantel y los voy a defender siempre. Ellos son los primeros en darse cuenta que no hicimos un buen partido. Sé lo que es Unión y lo que me puede dar este equipo. Todos están predispuestos, pero después es fútbol más allá de los esquemas. Lo jugadores son los que deciden y necesito a los que se animen. Es un momento que tenemos que saber transitar con personalidad y soltarse. Sacar esa rebeldía y orgullo. Esa entrega que a Unión lo caracterizó y la gente reconocía. Lo que me preocupa es que se necesita esa confianza que tuvimos para soltarnos. Confío en estos jugadores".
Por las bajas, consideró: "Son jugadores con lesiones y recaídas y los estamos viendo día a día. Miguel (Torrén) tiene una sobrecarga y lo de Enzo (Roldán) es más complicado por la rodilla. Es un plantel del que necesitamos de todos y estamos sufriendo las bajas, pero no es excusa y buscamos a los que mejor están".
"Los objetivos son el día a día y cada partido. Uno puede ilusionarse con algunas cosas, pero tiene que ser claro, más en esta situación. Más de eso no nos podemos focalizar. Es una cuestión de nuevamente retomar esa energía que nos identificaba como equipo. El que venía acá la pasaba mal y tenemos que sacar provecho de la gente a favor. Tenemos la responsabilidad de dar más para volver a festejar con esta gente. Ojalá volvamos a ser el equipo que conectó con la gente, siendo un desafío personal para estar a la altura. Somos conscientes que tenemos que ganar. Lo anímico en la vida es clave. No todo el mundo gana o pierde siempre, entonces tenemos que trabajarlo de la mejor manera y aceptar que estamos mal. Entonces trabajar, callarse y confiar. Volver a ser lo que éramos. No quiero que aparezcan dudas, porque tampoco queremos dibujar la situación y venimos de un mal partido. Hay que darle para adelante y que la gente vea algo bueno el sábado, sobre todo sometiendo al rival", enfatizó.
En otro tramo de la charla, el técnico no dio la formación: "En relación al equipo, estoy buscando a quiénes estén mejor en lo anímico y físicamente, pero sobre todo que tenga la personalidad para dar vuelta esto. Esto va más allá de los esquemas. Tenemos que comprometernos más que nunca. De política no quiero hablar mucho, pero sé que es un club muy político. Siempre digo que cada uno deberá hacerse cargo e intentar mejor en beneficio del club. No sé como es el tema profundo, pero lo único que sé es que nadie es más importantes del club. Si querés un bien apoyarás del lado en que te toque. La gente pasa y el club pasará. Tenemos que hacer de nuestro lado lo necesario para que la gente se sienta contenta".
"Hay que volver a los orígenes y animarse. La gente siempre nos apoyo y el sábado estará. Le pido un poco de paciencia más allá de querer ganar en casa y es normal que esté así, porque hace tres que no ganamos. Que se quede tranquila que haremos todo para conectar con ellos. Ganar sobre todo y estoy confiado en que lo haremos, por que veo un grupo que así lo quiere y sintió dolor por el partido pasado. Ojalá lo logremos", remarcó.
Cuando se le consultó sobre el nivel de los refuerzos, fue al hueso: "En relación a los que vinieron, cuando las cosas andan mal se cuestionan. No todos quieren venir a Unión, más allá del esfuerzo que el club haga y desde este lado para seducir. Queremos que Unión de una vez por todas cambie ese chip. Hubo jugadores a punto de llegar y en el final se fueron a otro lado, como a equipos que juegan copa. No pasa por lo económico. Entonces cuando estás tanto tiempo sin ganar parece que no sirve nadie. Yo pasé de Guardiola a ser el peor y lo entiendo. Sé que somos capaces de jugar mucho mejor y ahí está la cabeza del grupo. Hay que darle la confianza necesaria, porque siento que el sábado vamos ganar después del golpe duro que recibirnos. Hay que dar la cara".
"Estos son los jugadores que tenemos y por eso no me gusta hacer futurología. No puedo juzgar a quiénes no quisieron venir. Este es un plantel con muchos jóvenes y gente grande y me quedo con esto. Esto para nosotros tiene que ser natural y tenemos que saber sobrellevarlo. Sabemos la locura del fútbol, pero hay que saber enfrentarlo. Se fueron cuatro técnico en seis partido. Esta es la locura y esa presión juega en contra. Manejamos esto con la gente grande y le ponemos el pecho. Lo vamos a revertir y estoy seguro que ganaremos el sábado para tomar confianza", aseveró.
Asimismo, dijo que Unión le dio "la chance de ser feliz y de sentirme importante. Un aprendizaje de algo complicado como defender la categoría y ahora me moviliza seguir creciendo. Para mi Unión es el mejor equipo del mundo y estamos comprometidos. Depende de nosotros y no es el mejor momento, pero hay que pasarlo y estamos preparados para lo que venga. Es el partido para volver a ser nosotros. Es un rival que también necesita sumar puntos y estará ilusionado con ganarlo. Ahí está en nosotros en asumir el reto en nuestra casa y tomar los riesgos necesarios para ir a ganar".