Tras 8 partidos sin poder convertir, Lautaro Martínez se sacó la mufa y anotó el segundo gol en el triunfo 3-0 del Inter sobre el Calgliari por la fecha 18 de la Serie A, la última del año. Alessandro Baston y Hakan Calhanoglu de penal redondearon la goleada que le permite al conjunto de Milán escalar provisoriamente al primer puesto de la tabla de posiciones.
Una victoria práctica, efectiva, que nada más reflejó la diferencia en la clasificación en la segunda parte, pero cuyo valor es más que apreciable entre tanta igualdad y concentración de aspirantes a la primera posición, también con el Nápoles al acecho de la cima.
El gol de Bastoni fue oro, ya en el segundo tiempo, en el minuto 53, en una acción extraña. El inesperado desenlace goleador, con el cabezazo sin saltar, bombeado, por encima del portero rival, cruzado, hacia el otro poste, del central internacional italiano, tras un balón al área de Barella que cayó al lado izquierdo de la meta rival, ya desató un triunfo irrebatible.
Con el primer tanto en el marcador, ya tenía encarrilado el triunfo su equipo, cuando Lautaro Martínez remató dentro del área para marcar el 2-0. Lo necesitaba: acabó con 6 partidos consecutivos sin gol en general (anotó 2 en la última doble fecha de noviembre con la Selección argentina) y 8 con el Inter. Sólo había marcado 2 tantos en los últimos 10 choques con su club. O 4 en los 14 más recientes. Hasta su reencuentro de este sábado, en el minuto 71 y a centro de Barella, que ya había servido antes el 1-0 a Bastoni.