Nadie en Santa Fe se olvidará del 29 de abril del 2003. El Río Salado se metió en la ciudad inundando la vida, matando los recuerdos y destrozando todo a su paso. El agua entró por un sector inconcluso de la defensa en la Circunvalación Oeste y rápidamente cubrió un tercio de la ciudad.
Sin dudas una de las imágenes más impactantes y que quedaron en el recuerdo de la gran inundación del 2003 fue la del Estadio Brigadier General Estanislao López de Colón cubierto por el agua.
El "Cementerio de los Elefantes" había sido renovado con mucho esfuerzo en 2001. Pero en sólo unas pocas horas el agua llegaba hasta la altura de los travesaños.