Unión terminó con sabor amargo de su excursión a Córdoba por el triunfo que se le escapó sobre la hora ante Belgrano, que tuvo un dejo de polémica por el tanto de Matías Suárez en supuesta posición adelantada. Fue revisado por el VAR, que convalidó la conquista.
Un partido que parecía cerrado e iba a dejar al Tate como único puntero, al menos transitoriamente hasta que jugará Huracán. Por eso la bronca, ya que se había hecho un importante esfuerzo.
De igual modo, queda la satisfacción interna de haber dado todo y competitido de igual a igual, plasmando que estar donde estar no es casualidad, sino una causalidad producto del trabajo.
Será cuestión de ver si se puede mantener, que siempre es lo más complicado, cuando la dirigencia trata de levantar la inhibición para así reforzar el plantel. A modo de resumen, reviví la emoción del golazo de taco de Adrián Balbo en el amanecer del segundo tiempo en la voz de José Ignacio Astulfi al estilo Diez en Deportes.