La alegría por el triunfo histórico ante Gran Bretaña duró poco. Es que Argentina no pudo repetir su gran producción y cayó por 58 a 38 ante Ruanda, diferencia que las obliga a esperar una derrota de las británicas frente a las africanas para conseguir su lugar en semifinales. Un posible triple empate donde las europeas sean las ganadoras las obligaría a esperar una derrota de las dueñas de casa por más de 34 puntos.
La goleadora de la albiceleste fue Flor Chagas con 9 puntos, seguida por 6 de Amaiquen Siciliano. En las ganadoras lo mejor pasó por los 18 puntos y 18 rebotes de Bella Murekatete y los 15 más 6 recobres de Keisha Hampton.
Argentina entró al partido con algunas imprecisiones y poca efectividad en sus lanzamientos. Ruanda se los hizo pagar y rápidamente impuso un parcial de 5-0 para sacar la primera ventaja en el marcador. Lideradas por la entrega y la pelea de Agostina Burani, el representativo nacional niveló el desarrollo y puso pasar al frente.
Florencia Chagas encontró eficacia en sus lanzamientos de tres puntos y con dos seguidos, puso al frente a Argentina. Pero las faltas la complicaron y debió ir al banco de suplentes. En la rotación, las dirigidas por Gregorio Martínez encontraron variantes y se mantenían en juego. Las africanas hacían prevalecer su poderío físico y tomaban una buena diferencia a su favor, 20-13, con la cual cerraron el primer cuarto.
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Ruanda estiró su buen momento al inicio del segundo período. Argentina no encontraba variantes en ataque, no tenía fluidez y mostraban imprecisiones y malos porcentajes en sus lanzamientos. Sin jugar bien, las africanas estiraban la diferencia a su favor, con algunos aciertos de tres puntos, estiraba la ventaja y sacaba la máxima hasta llegar a 12 (27-15) promediando el cuarto.
Luego de un minuto de Gregorio Martínez y con el ingreso nuevamente de Chagas, Argentina pudo recuperar la memoria, ajustó la memoria y con un buen parcial de 7-0, se fue al descanso largo perdiendo, pero ahora por 27-22. La propia Flor se destacó con 9 puntos producto de su 3/4 en tiros de larga distancia, apartado en el cual Argentina tenía un pobre 4/24.
Al regreso de los vestuarios todo fue más cuesta arriba para las albicelestes. La pelea con el aro se acentuó y tiraron 1/15 de campo, ante un Ruanda que no desaprovechó las chances y los apuros de Argentina para estirar las diferencias con Hampton, Sifa y Murekatete como estandartes cerca del aro. Así, las dueñas de casa cerraron al frente por 48-29.
En los diez minutos finales la tónica se sostuvo. A pesar de una baja en la efectividad de las africanas, Argentina nunca pudo controlar el juego y acercarse con una Gretter controlada por la defensa rival y que no pudo hacer jugar al equipo. En este sentido la baja efectividad, con 5/35 de tres y 7/33 en dobles condenó a un equipo albiceleste que ahora deberá esperar una derrota de Gran Bretaña para tener un lugar en semifinales.