El curso de agua más importante de la ciudad de Santa Fe, la laguna Setúbal, presenta una preocupante nivel de contaminación de plásticos. Así lo reveló un estudio del CONICET y la Universidad Nacional del Litoral.
En comunicación con LT10 el Doctor Martin Bletter, investigador del CONICET y principal autor del estudio explicó la alarmante situación en la que se encuentra la Setúbal.
"Uno puede percibir a simple vista los plásticos y la forma desmedida en que se arrojan y en la que no se tratan", comenta el especialista que por este motivo "decidimos ponerle números a esto y poder compararlo con otros estudios del mundo".
Asimismo, esta problemática causó el interés de los especialistas "porque es la principal vía para tomar agua potable y es un factor de recreación significativo".
En el relevamiento, detectaron que generalmente se trata de "elementos que son de uso cotidiano y nos hace ver la falta de medida para que eso llegue a los cursos de agua", comentó en El cuarto poder.
El destino final de los plásticos es el Océano Atlántico y allí radica lo alarmante de la situación. "El tiempo en que llega a la desembocadura del Río de la Plata es el que va a permanecer en el ambiente" y ese daño es "enorme y el impacto a la fauna acuática es muy difícil de determinar", explicó Bletter.
Por otra parte, los basurales son el factor más importante, es decir, "la falta de manejo de residuos sólidos". En ese sentido, el investigador destacó que hallaron "muchos plásticos parcialmente quemados", dato que confirma que la quema de basura es una práctica vigente y que los bolcaderos son claves en la contaminación.
Uno de los datos más relevantes del estudios es el que reveló que hay alrededor de 100 botellas plásticas por kilómetro. No obstante, otro es aún más preocupante la presencia de micro plásticos. "Es el mismo plástico grande que está en un estado de degradación más avanzado", manifestó.
En ese sentido, explicó que "el problema es que una vez que está particulado es prácticamente imposible de recolectar", además "peces, aves e invertebrados lo podrían estar ingiriendo con consecuencias negativas".