La provincia de Santa Fe arrancó el año con una inflación que desde el IPEC consideran “significativo”: 1,8 por ciento en enero.
En diálogo con Fabián al mediodía, el titular del Instituto Provincial de Estadística y Censos, Jorge Moore, detalló además que la variación acumulada a partir de enero de 2017 y hasta igual mes de 2018 fue de 25,7 por ciento.
Pero lo más importante, en su visión, “es que los mayores aumentos (durante el mes pasado) provinieron de alimentos y bebidas”, rubro que “tiene una altísima incidencia en la canasta (básica)”.
Mientras tanto, no se registró influencia de incrementos que se venían trayendo, como en bienes y servicios básicos (compuesto sobre todo por las tarifas). Tras alimentos y bebidas, sobresalen esparcimieto y otros bienes (cigarrillos, cosmética y otros gastos).
En cualquier caso, para Moore se están manejando “niveles muy elevados de precios” y en rubros que afectan especialmente a quienes tienen menores recursos.
En cuanto a las perspectivas para este primer cuatrimestre del año, el especialista anticipó que proseguirán las subas de precios, “especialmente de algunos servicios”.