Se la conoce como la droga de las clases altas o la cocaína de los ricos. Se puso de moda en las fiestas electrónicas en Bogotá, en 2012. En la noche porteña, en cambio, se la llama “Tuci", con s o con c. El nombre no es algo que preocupe a los consumidores. Su nombre legal es 2CBy se trata de una sustancia psicodisléptica, sintetizada en Estados Unidos, en 1974 y fue bautizada como “cocaína rosa”.
En Buenos Aires su consumo es silencioso pero no por ello menos importante. Sin cuidado, el cantante Leo García realizó una transmisión en vivo desde su cuenta de Instagram y habló sobre la sustancia. Luego compartió una imagen de la droga.
Los efectos de la cocaína rosa
El llamado "viaje" que produce la sustancia es plenamente psicodélico. Según cuentan los consumidores en distintos sitios, altera todos los sentidos y cambia la percepción del mundo con alucinaciones visuales y del pensamiento. En algunos casos, el descontrol de la imaginación causa terribles ataques de miedo o pánico, igual que hace el LSD. Parece ser que esta droga combina los efectos alucinógenos de esta última sustancia con los efectos eufóricos y enérgicos del MDMA: la persona percibe como un aumento de energía muy placentero para el propio cuerpo, una sensación de fuerza exagerada y un intenso nerviosismo y excitación.
Según distintos registros policiales, en un comienzo esta droga fue detectada como parte de las sustancias que consumían varias bandas de ladrones colombianos instalados en la ciudad, en discotecas de música electrónica de Palermo y Costanera. El gramo puede valer cerca de 2 mil pesos y lo más común es comprarla fuera de las discotecas. Hace un año, por el decreto 722/1991, fue incluida en la lista de sustancias ilegales de nuestro país.