Investigadores del Instituto de Ciencia y Tecnología Cesar Milstein (ICT Milstein) y de la Fundación Pablo Cassará detectaron el SARS-Cov-2 con un kit de testeo rápido en muestras de pacientes positivos, lo que representa un importante avance en el desarrollo de esta técnica que podría agilizar tiempos y disminuir costos en los diagnósticos.
“Lo que logramos fue encontrar el virus en diez muestras que nos facilitó el ANLIS-Malbrán de pacientes que eran positivos. La siguiente etapa sería la ‘prueba de desempeño’, es decir habría que tomar un lote mayor y comparar los resultados del kit nuestro con la técnica que utiliza el Malbrán que es la PCR”, explicó Adrián Vojnov, investigador del Conicet y jefe del Laboratorio de Fitopatología Molecular del ICT Milstein.
La técnica, que todavía necesita validación para implementarse, consiste en “una amplificación específica del material genético del agente infeccioso, que en este caso es el virus, con cebadores, que es muy parecido a lo que se utiliza en las PCR”, detalló.
Vojnov puntualizó que el procedimiento “mecánico” es muy sencillo: “La muestra se agrega a una solución que está en un tubo, se cierra el tubo, se pone a incubar y en una hora está el resultado que puede observarse a simple vista”.
"El siguiente paso sería poder desarrollar el kit para que haga todo el proceso tomando como muestra el hisopado directamente, porque hasta ahora el trabajo se hizo sobre el material genético que nos envió el Malbrán; de esa manera podría hacerse el test en cualquier lugar de baja complejidad”, describió.
Si bien tanto esta técnica como la PCR “buscan el virus”, el especialista sostuvo que “la PCR necesita un equipamiento y un entrenamiento, en cambio la nuestra hace todo el proceso a la misma temperatura, por lo que lo único que se necesita es un calentador a esta temperatura, y eso simplifica mucho".
Estas técnicas se diferencian de las denominadas “serológicas” que en lugar de buscar el virus buscan los anticuerpos generados en el plasma de la sangre, lo que puede significar que la persona ha tenido contacto con el virus, pero no especifica si lo tiene en ese momento.
Vojnov, junto a Carolina Carrillo y el resto del equipo de investigación, venían trabajando desde hace años en el desarrollo de test rápidos. “Santiago Werbajh, integrante del grupo, venía estudiando la técnica para detectar los cuatro serotipos de Dengue, Zika y Chikungunya; cuando apareció la pandemia adaptamos la tecnología a través de la compra de los insumos específicos para abocarnos al desarrollo del test para coronavirus”, contó.
En ese contexto, el grupo del ICT Milstein y de la Fundación Pablo Cassará fueron convocados para formar parte de la Unidad Coronavirus, un espacio conformado por el ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MINCyT), Conicet y la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Productivo y la Innovación (Agencia I+D+i) para aunar esfuerzos de cara a la pandemia.
“Hay tres grupos de la Unidad Coronavirus que estamos trabajando en el desarrollo de test rápidos. Si bien por ahora avanzamos en forma separada, la idea es que podamos intercambiar información para que los tres podamos desarrollar técnicas exitosas”, relató.
Sobre este trabajo articulado y solidario entre los científicos, Vojnov aseguró que “la recuperación del Ministerio ha sido fundamental” e indicó que han recibido mucho apoyo de la cartera científica,“tanto en recursos económicos como en la logística”.
“Lo mismo sucede en la articulación con el ANLIS Malbrán, creo que no sólo para el presente sino que de cara al futuro, este trabajo articulado nos va a dejar mejor preparados", concluyó.