Este jueves, el gimnasio Roque Otrino fue escenario de la primera conferencia de prensa del entrenador de Colón, Eduardo Domínguez. Todo bajo un estricto protocolo a raíz de la pandemia del coronavirus. Habló cerca de una hora, tocando temas del presente, los objetivos y la necesidad de que los chicos de las inferiores tendrán mayores oportunidades.
"En principio, sabemos las dificultades económicas que atravesamos todos. Cuando sucedió la cuarentena, tuvimos varias charlas con el presidente (José Vignatti) y al comienzo no esperábamos que se hiciera tan largo. Entonces, primero apostamos al plan de retener jugadores, pero cuando la cosa se extendió, entendiendo los problemas, se buscó darle valor a los chicos que pueden aparecer. Colón tenía en su momento un plantel extenso y por más que se fueron nombres importantes, se quedaron también otros importantes. Sabemos a lo que nos enfrentamos y por eso estamos en la idea de barajar y dar de nuevo. Nos hacemos cargo en la promoción de darle lugar a algunos chicos para que den el salto", apuntó en sus conceptos iniciales.
Luego contó que lo llevó a aceptar este nuevo desafío en el Sabalero, mucho más sabiendo que estaba en la zona roja del descenso: "Lo que me motivó a volver fue conocer la ciudad, la gente y las ganas de trabajar, de sentirme útil y aportar una propuesta valedera. Mucho más sabiendo la situación por la que atravesaba el club. Eso me impulsó más. No fue difícil la decisión, pero sabíamos a lo que nos aventurábamos. Nos sentimos cómodos y estamos como queremos. Hay muchas cosas que a nosotros nos llevan a querer a ganar. Eso sí, que no haya descensos no es bueno para el fútbol argentino. El que hace las cosas mal a lo largo de tres años debe asumirlo y por eso esta es una decisión que debería replantearse".
Indefectiblemente, el DT expuso que no era momento para hacer incorporaciones, sino darle lugar a los jugadores del club ante la consulta de Diez en Deportes: "Se van acoplando chicos que, a decir verdad, a muchos no conocía. Entonces la meta pasa por trasladarles nuestros conocimientos y estar en permanente contacto con el coordinador (Adolfo Manetti). Los chicos casi perdieron el año y por eso vamos dándole lugar de a poco para que conozcan el trabajo que se hace. Los queremos llevar de a poco y se irán sumando más".
"Estoy feliz. Sentimos que las expectativas son altas. Nos vamos conociendo con el plantel, sobre todo con quienes no compartimos la época anterior, y la conexión es interesante. Después dependerá del jugador. Nosotros vamos a decirles qué queremos y cómo hacer funcionar algunas cosas, pero siempre dependerá de ellos. Nuestras expectativas siempre van a ser las mejores para competir de la mejor manera, siempre sabiendo que el fútbol argentino decayó producto de las carencias económicas. La quita de los descensos hizo más grande la brecha", agregó.
"Me parece algo lógico que el hincha eleve la vara de exigencia, porque quiere decir que la institución está a la altura. No hay que conformarse. Esto es un conjunto, el equipo es apoyado por los hinchas y se necesita que le exijan ganar siempre, porque si no se entraría en una dinámica de que termina dando lo mismo y no debe ser así. Las cosas no se logran así nomás y me parece que es lógica y esperada la exigencia de la gente, mucho más después haber logrado llegar a la final de la Copa Sudamericana", expuso.
Entre sus conceptos más relevantes en la atención a la prensa, donde estuvo LT10, Domínguez dejó de lado el 3-5-2 con el que viene trabajando por otro argumento: "Es una gran posibilidad de jugar con ese sistema. Después la cosa puede variar en la cancha. Se pueden nombrar un montón de numeritos, pero lo que buscamos es el funcionamiento, no un esquema. Potenciar las virtudes como equipo. Planteamos diferentes planes, pero los movimientos madres serán los mismos. Lo que pretendemos es ser más que el rival".
"Hoy tenemos que prepararnos para ser competitivos pensando en el año que viene. Queremos hacerlo bien. Todos los días trabajamos para ello. Conocemos nuestras falencias y trabajamos para que sean cada vez menos. Pero también las virtudes y lo que queremos es que el equipo lo sepa. Cuando lo encontremos, seremos un gran equipo. Es cuestión de tiempo", concluyó.