Luego de la cumbre en Rosario a la que asistieron los cuatro ministros de la Corte Suprema, jueces federales de todo el país, el Procurador General de la Nación y el gobernador Omar Perotti, entre otros funcionarios públicos, preocupados por el narcotráfico, siguen las repercusiones.
Daniel Erbetta, ministro de la Corte Suprema de Justicia de la provincia fue muy crítico y aseguró que "da la sensación que hay una desorientación enorme, porque creer que el problema de la seguridad de Rosario se va a resolver creando un juzgado federal no resiste".
Además, sostuvo que "a nivel federal, en el acto de ayer, la falta de autocrítica es algo increíble", y concretamente afirmó que el problema en este área no es de recursos, sino que "es un problema sistémico, ya que la justicia federal es una justicia anquilosada".
Incluso sumó que el problema "no es cuantitativo, sino cualitativo", y que la justicia federal se resistió permanentemente a implementar el sistema acusatorio por lo que sostiene "un sistema que nunca va a funcionar".
También fue crítico con la justicia federal de Rosario que "es increíble" ya que tiene una estructura de pirámide invertida con dos jueces de instrucción y tres fiscales, y tres tribunales de justicia oral. Lo que se traduce en 9 jueces de juicio oral y solo tres fiscales para la investigación preliminar.