Cultura - 70 años de su muerte

Martes 26 de Julio de 2022 - 12:03 hs

Eva Duarte: Entre la desmesura y el fetichismo del cuerpo

A días de cumplirse 70 años de su muerte, las investigadoras y docentes Soledad Quereilhac y Paola Cortés-Rocca, y el escritor y docente Juan Mattio, analizan las representaciones que circularon en distintos momentos históricos.

Actualizado: Martes 26 de Julio de 2022 - 12:07 hs

Emblemática y audaz, la figura de Eva Perón ha sido sucesivamente retomada desde la literatura, la poesía, el cine y el ensayo a partir de focos envolventes que entrecruzan la fascinación por narrar el derrotero de su cuerpo -una obsesión que conecta narrativas tan disímiles como las de Walsh, Borges o Viñas- y hasta instalan una ambigüedad problemática entre verdad y ficción como la que propuso el escritor Tomás Eloy Martínez en su célebre "Santa Evita", pero que en otro plano permiten rescatarla del pasado para ubicarla como un emblema de las luchas del presente.

A días de cumplirse 70 años de su muerte, las investigadoras y docentes Soledad Quereilhac y Paola Cortés-Rocca, y el escritor y docente Juan Mattio, analizan las representaciones que circularon en distintos momentos históricos para pensar cómo jugaron la época y las condiciones sociales y políticas al momento de narrar a Eva Perón, al tiempo que ofrecen perspectivas compatibles para desentrañar insistencias y vacancias en torno a su figura, así como para entender los modos en que circuló desde la ficción quien ocupó y sigue ocupando un rol central en la narrativa política contemporánea.

Para Mattio, hay una serie o una repetición que insiste en las ficciones sobre la figura de Eva Perón, "cierta fascinación macabra con su cuerpo", y ejemplifica: "Los cuentos de Viñas, Walsh, Onetti e incluso Borges están centrados en la escena del funeral y el posterior secuestro del cuerpo. Lo mismo puede verse en 'Santa Evita', de Tomás Eloy Martínez. Habría otra serie, que incluye a Copi, Perlongher o Aira, donde la constante está en cierta desmesura asociada a Eva. Desmesura política, sexual o discursiva".

"Es extraño, pero en las representaciones que encontré en estas ficciones, parece haber cierta indiferencia por la figura de Eva mientras estuvo viva y ejerció el poder. Como si su fuerza hipnótica se multiplicara a partir de la muerte. Su ausencia está tan presente –y es tan actual- que se nos aparece como una figura ubicua", reflexiona el autor de "Tres veces luz", quien dictó cursos y talleres de lectura para abordar estas líneas temáticas.

Cortés Rocca es crítica cultural especializada en el cruce entre literatura y visualidad y escribió, junto a Martín Kohan, el libro "Imágenes de vida, relatos de muerte. Eva Perón: cuerpo y política", un ensayo publicado por Beatriz Viterbo en el que trabajan la lucha de sentidos en torno a la dirigente política. Al pensar en las insistencias que confluyen en las representaciones, distingue que uno de los elementos es "la legitimidad o ilegitimidad para estar en un lugar tanto de un lado como del otro: tienen que ver con su belleza, su juventud, con su ser esposa, no ser madre pero ser madre del pueblo, o posiciones inversas que justamente dicen que ocupa un lugar ilegítimo porque no es una funcionaria del gobierno (es solo la esposa del presidente) o porque es hija ilegítima".

Este aniversario de la muerte de la impulsora del Partido Peronista Femenino tiene al estreno de la serie "Santa Evita", una producción de Star+ basada en la novela de Tomás Eloy Martínez y protagonizada por Natalia Oreiro, como foco de atención. La investigadora y ensayista Soledad Quereilhac, quien analizó y trabajó esa ficción, sostiene que "hay un pacto 'desleal' de lectura".

"Tiene que ver con la torpe indistinción, a nivel de la técnica narrativa, entre lo ficticio y lo real, entre lo que está basado en documentos históricos (testimonios, memorias, filmaciones, entrevistas) y aquello que se inventa. Por supuesto que la narrativa literaria se dedica básicamente a contar ficciones, esto es, a hacer un arte de lo que no sucedió y puede ser contado. No es a eso a lo que me refiero. Si no a la muy mala resolución entre literatura e historia, entre non-fiction y novela, entre una perspectiva omnisciente y un exagerado protagonismo (autocelebratorio) de la voz narradora, que se presenta como la del mismo Tomás Eloy Martínez", argumenta la doctora en Letras de la Universidad de Buenos Aires.

Tomado también como base de una de las películas clásicas sobre la líder política como "Eva Perón", dirigida por Juan Carlos Desanzo sobre guión de José Pablo Feinmann, el libro tuvo varias reediciones y sobre esa historia Quereilhac aporta que "son muy significativas las anécdotas que Martínez relata en diferentes entrevistas, en relación con los equívocos que produjo su novela. Se jacta de haber 'engañado' a Feinmann, que tomó como real una escena narrada en 'Santa Evita' y que incorporó, por tanto, a su película. También se ha jactado de 'engañar' a la Unión de Obreros de la Construcción y la Unión de Obreros Metalúrgicos sobre una frase que Eva supuestamente nunca pronunció pero que aparece en su novela".

"Si esos equívocos se producen no se debe tanto al error de lectura, sino al tramposo planteo de la ficción; al mal resuelto juego entre convenciones genéricas (novela, non-fiction, relato histórico, periodismo de investigación) y, más profundamente, a una convicción netamente noventista de que la verdad histórica ya no importa, todo puede ser relato e invención, sin reglas siquiera formales. Tampoco la política parece importar. Hay un snobismo posmoderno, inevitablemente reaccionario, claro, que se impone por sobre sus propios materiales narrativos (la historia del cuerpo de Eva) para neutralizarlos políticamente y para bastardearlos históricamente", sostiene la investigadora del Conicet.

La autora de "Cuando la ciencia despertaba fantasías. Prensa, literatura y ocultismo en la Argentina de entresiglos" asevera que "como todo personaje importante de la historia, inscripto en un movimiento popular, Eva es 'objeto' de disputa ideológica, potenciado además por su condición de mujer, tradicional 'objeto' de manipulación de la cultura patriarcal".

Otras lecturas

La novela "Santa Evita", escrita por el periodista y escritor Tomás Eloy Martínez, fue publicada originalmente en 1995 por la editorial Planeta y tiene, por estos días, una versión audiovisual codirigida por los cineastas Rodrigo García y Alejandro Maci y protagonizada por Natalia Oreiro que se estrenará el 26 de julio -cuando se cumplan 70 años de la muerte de la líder del movimiento peronista- por la plataforma Star +, propiedad de Disney.

A propósito de ese estreno, Juan Mattio, Paola Cortés Rocca y Soledad Quereilhac vuelven sobre esa obra para repensarla desde nuevas claves de lectura.

Cortés Rocca dice que "a fines de los '90, la figura de Eva Perón no tiene la virulencia de años anteriores y ya no es ni la madre protectora del pueblo ni la mujer del látigo, como la ve la oposición. Se ha convertido en una figura histórica considerando que hay cambios en los roles de las mujeres. En ese contexto hay que leer a la Eva de Tomás Eloy Martínez", apunta.

"No es un libro de ficción, es de no ficción, un trabajo periodístico narrativo, una escritura que usa los recursos narrativos para trabajar con un material real. El género es importante, es el momento de auge de la novela histórica en la Argentina. Hay algo en esa especie de libro de historia que se puede leer sin ser aburrido que lo hace legible para todo el mundo. Hay algo de policial, de diario íntimo, que lo hace profundamente legible, una gran pieza para las masas. No se trata solo de narrar la vida sino la muerte, toda la historia del cadáver también termina cerrando ese relato. Vuelve a Eva legible", dice a Télam la investigadora.

Para ella, "la serie va a ser leída de un modo parecido a como fue leída la novela, no problemático para el presente, es ese momento en el que los personajes históricos hacen las paces con el futuro. También va a haber diferencias: una central es el kirchnerismo, que hizo que el peronismo deje de ser la punta de lanza del neoliberalismo y se vuelva cercano al de la década del '40 con una juventud fuerte".

Quereilhac, quien cuestiona el pacto "desleal" con los lectores planteado por la novela y la considera "la expresión de una operación estético-ideológica sobre Eva" porque neutraliza su potencia política, dice que al no haber visto todavía la serie no puede "anticipar si va a ser o no leída como la novela", ni saber "qué versión, adaptación o reelaboración crítica realiza la serie respecto de su obra de referencia" pero afirma que "en el marco actual de un revisionismo historiográfico diferente al de los '70 y '80, pero muy sólido en relación a la relectura que se plantea de los fenómenos populares y de las perspectivas historiográficas liberaloides (sic), la vuelta a Eva desde la historia, desde las artes y desde la industria del entretenimiento tiene un vasto terreno por explorar".

"La explosión del feminismo como movimiento, que incluye el desarrollo de los estudios feministas interdisciplinarios, también provee de eficaces e innovadoras herramientas para volver a Eva", subraya la docente de la Facultad de Filosofía y Letras (UBA).

Por su parte, Mattio explica que "el peronismo es un evento político mutante y eso supone que se modifica según el momento histórico".

"Si acordamos que no es lo mismo el peronismo que representó Menem que el que representó, por poner un nombre, Cristina. Y que no es lo mismo el peronismo durante la dictadura que este que hoy está a cargo del Estado; entonces tenemos que pensar que 'Santa Evita' se ve –y se verá afectada- por todas estas transformaciones. Los objetos del peronismo están condenados a seguir la misma deriva mutante que el movimiento político", apunta.

 

Fuente: LT10