Un hombre de 34 años quedó en prisión preventiva en el marco de una investigación por el robo de 27 teléfonos celulares en tan solo una semana. Además, se lo imputó por el robo de 103.500 pesos en la ciudad de Santa Fe.
Se apoderó ilegítimamente de 22 teléfonos celulares de diferentes marcas y modelos de una casa de electrodomésticos sobre la avenida Gorriti al 4.300, y el resto en cinco robos en los que amenazó a las víctimas con un arma de fuego.
Sergio Carraro, juez de la investigación penal preparatoria explicó por LT10 que esta detención permite avanzar en la ruta de los celulares robados, y que la fiscalía "viene realizando investigaciones en hechos similares, paralelos".
Además, contó que las pericias realizadas a un teléfono celular secuestrado en otros hecho, hay un vínculo con las casas que se dedican a hacer arreglos y a la compra y venta de celulares.
En cuanto a este último caso, declaró que "nos lleva a sostener objetivamente que la persona que se dedicaba a sustraer estos elementos, los reducía en esos otros tipos de comercios".
"En abril intervenidos en dos casas, una era una vivienda particular donde una persona se dedicaba al arreglo de celulares y esta persona a lo largo del procedimiento aceptó su responsabilidad y está condenada en un proceso abreviado". Mientras tanto, "los organismos de control han fallado o no han existido, como en el caso de una persona que tenía un comercio de compra y venta de celulares donde se pudo detectar que tenía celulares sustraídos".
Por lo tanto, sostiene que "la trama de una posible asociación ilícita es un dato casi en concreto".